Juana Tinelli, la hija menor del histórico conductor Marcelo Tinelli, rompió el silencio de la forma más cruda posible: llorando desconsoladamente frente a cámara y compartiendo su dolor con el mundo. En un video que subió a TikTok y que rápidamente se viralizó, la joven influencer se mostró devastada, y sus palabras dejaron helados a sus seguidores: “Sé que el dolor no es eterno, pero a veces parece que sí”.
El video, editado con diferentes planos donde Juana aparece con los ojos hinchados y sin maquillaje, fue musicalizado con el desgarrador tema de Billie Eilish, “When The Party’s Over”. La letra, cargada de nostalgia y resignación, pareció hablar por ella. Y muchos lo interpretaron como un grito de auxilio.
“Nunca me mostré vulnerable, pero esto también soy yo”
Con esa frase, la hija de Marcelo Tinelli y Paula Robles dejó ver que su exposición no fue un capricho: fue un acto de sinceridad brutal. “Todos sentimos. Todos sufrimos. No quiero mostrar solo lo lindo de mi vida”, confesó, mientras cientos de seguidores le enviaban mensajes de apoyo, contención y solidaridad.
Pero no todo fue empatía. Como suele pasar en redes sociales, también hubo comentarios crueles que cuestionaron su sufrimiento: “Un psicólogo se hace un festín”, “Esto no me conmueve”, “Hay gente con problemas reales”. La contracara de una red que muchas veces no perdona ni el dolor.
¿Qué le pasa a Juana?
Cercanos a la familia aseguraron que la joven sigue conmovida por la reciente separación de su novio, el polista Camilo Castagnola. Aunque inicialmente desmintieron rumores de infidelidad, la ruptura se confirmó días atrás, y desde entonces, Juana se mostró más retraída y ausente de los eventos sociales.
Según fuentes allegadas, sus padres ya tomaron cartas en el asunto: hablaron con ella y se pusieron en contacto con profesionales para acompañarla emocionalmente. “La familia está muy presente”, aseguraron desde el entorno.
El lado B de la fama
El caso de Juana Tinelli volvió a poner sobre la mesa un debate cada vez más necesario: la salud mental, incluso en quienes parecieran tenerlo todo. Porque el dolor no distingue apellidos, y los likes no curan heridas.
“No estás solo”, escribió Juana mirando a cámara, con la voz quebrada. Y aunque parecía hablarle a sus seguidores, quizás también se hablaba a sí misma.