HISTORIAS CRUELES

El barrio en donde la gente se mata porque sí

Dos pibes murieron en la noche del domingo. Hace un año hubo un operativo policial gigante. Pero la violencia sigue.
lunes, 22 de junio de 2020 · 13:48

El barrio se llama La Palmera, y allí, la gente se mata sin mayores motivos ni explicaciones. Anoche, domingo 21, hubo dos pibes muertos. Uno, de 18 años, salió a ver “qué onda” a la puerta de su casa, y recibió un tiro en la cabeza. El otro, de 19, murió de otro balazo, pero en el pecho, cuando los familiares del primero salieron a vengar la muerte.

En abril del año pasado, la policía instaló 300 efectivos en ese barrio, un verdadero polvorín social. Hubo muchos presos, muchos búnkeres de droga desarmados. Por un tiempo, hubo algo de eso que llaman pomposamente “paz social”. Un tiempo, corto. Después volvió la violencia, el narcotráfico, las “transas” por cualquier delito, y la policía volvió a hacer la vista gorda, distraída en otros menesteres.

Anoche, Nahuel González estaba con su novia, dentro de la casa en donde vivió desde casi siempre. Escuchó que había lío en la calle. Abrió la puerta, salió, y cayó fulminado. Un balazo le había dado en la cabeza.

Apenas habían pasado las 20. Lo que pasaba en la calle era algo que pasa con mucha frecuencia. Dos grupos de vecinos del barrio enfrentándose, con tiros, con piedras, con molotovs fabricadas con botellas de cerveza.

Nahuel fue subido a un auto, que salió velozmente rumbo al hospital Alejandro Korn, en Melchor Romero, el lugar más cercano de este barrio del partido de La Plata que es una especie de caso testigo de la violencia instalada en Argentina, una violencia de la que casi no se habla, que se oculta y se tolera.

Pero ya estaba muerto. Lo bajaron, lo vieron los médicos, y confirmaron que no había nada que hacer.

La noticia de la muerte de Nahuel González, 18 años, con novia y una corta historia que ya no avanzará, se expandió rápidamente. Una horda indignada salió a recorrer las calles angostas de La Palmera. Se les cruzó en el camino Aldo Rivas, 19 años. Lo balearon.

Aldo Rivas cayó en la calle tal vez sin saber por qué le habían pegado un tiro. El balazo le dio en el pecho. Habrá sentido el impacto, tal vez un ardor como fuego. Y murió. Lo llevaron a la Unidad de Pronta Atención (UPA) de Los Hornos. Era tarde. Otra historia corta, con algunas alegrías y muchas tristezas, que rápidamente será olvidada.

"Estamos trabajando en la causa, se han tomado un montón de testimonios, pero como el conflicto fue entre dos bandas está muy complicada la toma de declaración y los dichos de cada uno", explicó la fiscal María Eugenia Di Lorenzo, de la UFI 17, a cargo del caso.

Dijo que, entre los testigos, "algunos no quieren declarar, otros declaran la mitad de lo que saben, o dicen cosas encontradas, está muy complicado".

Las causas por la muerte de los dos pibes eran una parte. Otras 8 estaban armadas ya en el escritorio de la fiscal. Todas de La Palmera. Por violencia de género y violencia intravecinal. En el último fin de semana.

"Es un barrio muy complicado con el tema drogas y apropiación de terrenos. Todavía no hay ninguna novedad puntual sobre el motivo del enfrentamiento, sabemos que son dos bandas, no sabemos si el motivo fue por tema de drogas u otra cosa, todavía la investigación está en el inicio", dijo la funcionaria.

El barrio La Palmera queda en el partido de La Plata, la capital de la provincia de Buenos Aires. Allí andar con barbijo y hablar del coronavirus es una excepción. Allí se matan por otras cosas, o por cualquier cosa. Allí, Argentina tiene un ejemplo de advertencia. El huevo de la serpiente de una sociedad que, lamentablemente, puede llegar a ser.

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