Analí Fernández, vocera de los padres, explicó en AM550, que "todo comenzó por la denuncia de un alumno y de un padre sobre las instalaciones edilicias. Fue por una publicación de un diario del pasado 8 de marzo. Tiempo después una empresa comprobó que no existían esas deficiencias en el colegio".
"El Concejo de Educación solamente escuchó una campana sobre las 1200 matriculas. Nosotros pedimos audiencia con los funcionarios provinciales Pidieron audiencia para explicarles todo lo que hacen este personal directivo por esta escuela”, dijo Fernández.
Por otra parte, Analí Fernández señaló que "las determinaciones se tomaban ida y vuelta entre directivos y padres. Siempre eran escuchados los padres, pero no entendemos la determinación que se tomó la semana pasada con esta determinación”.