Lado B de la nieve: Barro, agua, mugre, lo que el agua dejó

Las bardas se tiñeron de blanco. Día largo, intenso, mojado y nevado; con estos adjetivos calificativos doy inicio al relato diario. Desde la calle, caminando, observando y escuchando. Pasadas las 4 de la madrugada de hoy un sonido agudo y constante (cada 20 segundos), me hizo saltar de la cama. Con un ojo abierto y el otro cerrado llegue a leer entre líneas y parpadeo. “Está nevando”. Y lo primero que pensé: “Paula abrígate para salir al móvil”…

Pasadas las 7 de la mañana vehículos que venían desde el oeste capitalino hacia el centro cargaban en sus techos y ventanillas restos de nieve. El agua de a poco fue diluyendo los copos restantes que habían usurpado no sólo lugares en los autos, sino también en los plazas y parques hogareños… Sin embrago, “los conductores mañaneros”, ni la nevada los para… Velocidad mínima no la respetaban provocando en cada pozo o esquina una especie de “volcán en erupción”… ocasionando no sólo bañadas literales a los peatones, ciclistas y motociclistas, sino también permitiendo el ingreso de agua a varias casas a escasos metros de la vereda.

Seguimos camino y la situación no calmó, al contrario, el agua era abundante, en demasía, y consigo basura, basura y más basura… (no aprendemos más los neuquinos, mugrientos, hasta la médula)… Llegamos a Valentina Sur Rural y antes de estacionar (no podíamos visualizar el cordón con la calle) Ricardo, nos hacia señas con las manos desde su almacén… “Por acá podes pasar, hay dos maderitas, están abajo del agua, pero pisa con confianza”, me dijo mientras pensaba o hago la gran Piquín con un “gran” salto o confío en las tablas… confié en las tablas, resultado: Barro hasta las rodillas…

Mi contratiempo es mínimo comparado con la situación que conviven los vecinos del oeste… así como Ricardo, Ana, Lucia, Mariela y Enrique, de los barrios Confluencia y San Lorenzo nos relataron la misma problemática. Cada día que se anuncia, se anticipa y se esperan lluvias, ellos rezan, putean e imploran que el gobierno o quién deba tomar cartas en el asunto lo haga, con obras concretas, con asistencias, con permanencia y respaldo…

Más de cuatro horas recorriendo los sectores más críticos y menos contenidos. Ni un patrullero, ni defesa civil ni gente del municipio se topó con nosotros… imagínense si lo habrán hecho con los vecinos…

Y este fue el lado B de la nieve… lo que el agua dejó y se llevó. Un jueves blanco, nublado y pasado por agua en el móvil mañanero