EXCLUSIVO
La madre del soldado Córdoba se reunió con la ministra Martínez
“Estamos lidiando con un 'monstruo' que es el Ejército y necesitamos que todos nos puedan acompañar”, sostuvo la familia.No hay dolor que duela más que el dolor del alma. Es hoy la “melodía” de la triste realidad que le toca atravesar a Natalia Uribe y a toda la familia del soldado voluntario Pablo Córdoba, que a esta altura -y dado el peso de las evidencias científicas- fue asesinado de dos disparos en la madrugada del 1 de junio de 2023 en el ejército de la ciudad. La mamá del soldado, la hermana y unas tías portando banderas con la imagen de la víctima y con frases en reclamo de justicia permanecieron ayer estoicas y con admirable fortaleza en las afueras del Cine Teatro municipal esperando tener la posibilidad de mantener un diálogo con el gobernador Rolando Figueroa, quien había asistido al acto de reasunción del intendente Carlos Koopmann al frente de la Municipalidad de Zapala.
Fue en ese contexto, ya finalizado el acto protocolar, cuando la actual ministra de Educación Soledad Martínez y ex intendenta de la ciudad (entre los años 2011/2019) se acercó a saludar y dialogar con la acongojada familia. Seguidamente y en declaraciones exclusivas a MEJOR INFORMADO que la funcionaria expresó que “la familia estaba esperando tener una oportunidad para poder conversar con el gobernador, pero lamentablemente era algo que no estaba programado" ya que tenía una actividad en Villa La Angostura y "salió rápidamente ni bien terminó el acto".
"Vamos a hacer alguna gestión para que de ser posible los reciba sino es el gobernador, el ministro de Derechos Humanos Jorge Tobares, y puedan conocer las inquietudes de la familia", acotó y agregó que los van a "acompañar en un proceso tan doloroso y tan trágico como el que están atravesando”. Al ser consultada sobre cuál era su pensamiento personal sobre el caso, Martínez respondió que estuvo "en contacto con Natalia" y que pudo "acompañar alguna de las marchas que hacen todos los meses".
"Por supuesto es una tragedia. A mí me conmueve mucho la fortaleza y la entereza de Natalia, del papá de Pablo y de toda la familia para poder sostenerse en esta lucha por justicia que por supuesto es lo único que recompone los vínculos familiares y la historia familiar y que recompone de alguna manera la tragedia que han tenido”, manifestó Martínez.
Por último, hizo un expreso pedido a los organismos que intervienen en la causa: “Es tan importante que el Juez se comprometa con esto, que la Fiscalía se comprometa con esto y que no haya ninguna política corporativa que proteja a ningún hecho que merece ser esclarecido en nombre de Pablo y de la de la familia de Pablo”.
Natalia Uribe, la mamá del soldado Córdoba, quebrada del dolor pero con una fortaleza admirable, a su turno comentó: “Estuve aquí para ver si me podía recibir el gobernador para hacerle saber los pormenores de la causa y para pedirle acompañamiento y asesoramiento también en cómo me tengo que mover porque realmente a nosotros se nos ha hecho cuesta arriba y somos una familia común y corriente que no tenemos noción de los pasos a seguir”.
A continuación detalló el encuentro con la ministra Martínez: “Al saber que el gobernador ya se había retirado, se acercó Soledad Martínez y me dijo que iba a hablar con él para que nos pudiera recibir aunque sea unos minutos y que también iba a hablar con el ministro de Derechos Humanos para que estén al tanto de nuestra situación y nos puedan acompañar desde algún lugar”.
En la misma mañana de ayer, la familia del soldado había realizado la habitual marcha de todos los meses pidiendo y reclamando justicia. Sobre las certezas que tienen hasta el momento sobre el triste suceso, Natalia sostuvo que “lo que hay con certeza dentro del expediente es que a mi hijo lo mataron a sangre fría, que le pegaron dos disparos en la cabeza y que las autopsias han revelado que mi hijo no pudo haberse suicidado y ahora estamos en el camino de buscar a los responsables de todo esto. Si bien dentro del expediente hay un imputado por encubrimiento, todavía falta un gran paso que es saber y reconocer quiénes fueron los asesinos de mi hijo”.
"Fue una reconstrucción del caso muy payasesca."
A continuación, siempre en contacto exclusivo con este medio, y al ser preguntada por qué pensaba que se había dilatado tanto el caso, fue contundente al responder: “Yo creo que tiene que ver con la predisposición del juez federal Hugo Greca que desde un principio a esta causa no le tomó importancia. Se presentó a Zapala a hacer la inspección ocular y una casi reconstrucción muy payasesca. Eso lo hizo recién a los 37 días de que hayan asesinado a mi hijo. Estuvieron todo este tiempo tratando de ver de qué manera mi hijo se suicidó, buscando siempre la culpabilidad en mi hijo. Tratando de ensuciarlo, haciendo campañas bajas en donde incluso desde el propio Juzgado se filtró información, se filtraron audios de mi hijo y los hicieron parecer como que era en otro contexto. Realmente todo esto que nos ha hecho pasar el juez para nosotros es una burla”.
Luego, lamentó la poca “empatía” de la justicia. “No nos sentimos protegidos por quienes nos tendrían que garantizar la justicia y creo que tiene mucha responsabilidad tanto él (Greca) como el teniente coronel Germán Isidro Green que es quien en primer momento (desde el Grupo de Artillería 16) salió a plantar una hipótesis como cierta -que es la hipótesis del suicidio- y se encargó de que todos los medios se enteraran solo de eso”. Para finalizar, explicó cuáles son sus mayores expectativas por estas horas: “Primero, que se aparte al juez. Por eso también me gustaría también el asesoramiento de la gente de Derechos Humanos para saber a dónde recurrir y qué más hacer”. También la madre del soldado dio a conocer que ya lo denunciaron al juez ante la Fiscalía de Zapala por la "violencia" con la que los ha tratado.
Además del apartamiento del juez, pidió que a la cabeza de la investigación "se ponga un juez que quiera conocer la verdad y que se encargue de investigar absolutamente todo y a todos los del ejército para ver quién hizo esto con mi hijo”.
La lucha contra el Ejército, al que tildaron de “un monstruo”.
La familia del soldado Pablo Córdoba se mantuvo ayer siempre firme, tranquila y en paz y en ese marco. Fueron muchas las personas que se acercaron a brindarles su saludo y solidaridad. Entre ellos, el propio intendente Carlos Koopmann, quien se comprometió a recibirlos en una audiencia en la sede municipal en los próximos días. De igual manera, lo hicieron concejales y el reelecto presidente del concejo deliberante Víctor Chávez. En ese momento fue cuando Daiana, la hermana de Pablo, expresó que están "muy solos como familia": "Lamentablemente estamos lidiando contra un 'monstruo' que es el ejército y encima con una justicia que, en vez de acompañarnos a nosotros, nos discrimina, nos abandona y nos maltrata más que todo; y si no, nos acompañan ustedes, que son nuestros representantes, a quien le pedimos ayuda".