Miguel Ángel Russo fue a la conferencia de prensa posterior al 1 a 0 con que Platense eliminó a su San Lorenzo en las semifinales del Apertura, pero no quiso referirse a sus próximos pasos. “No voy a hablar sobre mi futuro”, fue su sentencia.
El experimentado entrenador no desmintió el interés de Boca, pero tampoco aseguró su continuidad en la institución del Bajo Flores. “De lo único que voy a hablar es de San Lorenzo”, sumó con polémica ante la prensa y sólo criticó el hecho que su actual equipo tenga por delante el 4 de junio el partido por Copa Argentina ante Quilmes.
Esta postura de Russo no hace más que alimentar la posibilidad de que el ex futbolista inicie su tercer ciclo en el Xeneize. El plan de la institución que preside Juan Román Riquelme es presentarlo el martes para encarar lo que será el Mundial de Clubes.
Para ello, en Boca tienen armada la logística de viajar a Estados Unidos el 9 de junio y todo parece indicar que será con Russo armando la lista definitiva de futbolistas e incluso esperando el arribo de algún refuerzo.
Horas decisivas en una jornada de domingo que en San Lorenzo no terminó con el pitazo final del árbitro Leonardo Rey Hilfer. El éxodo no sólo incluye al DT, sino que suma una larga lista de integrantes del plantel.
Apoyo previo
En el estadio, los hinchas de San Lorenzo optaron por apoyar a Russo e insultar a los dirigentes en la previa al cruce con Platense.
Un desenlace como mínimo desprolijo que no apaga la polémica y las formas en que se manejó al sucesor de Fernando Gago en el banco de suplentes de Boca.