Luciana Salazar volvió a ser noticia después de revelar que decidió poner a la venta gran parte de su vestidor. La mediática explicó que tomó esta determinación al darse cuenta de que tenía una acumulación enorme de prendas que ya no usaba, y que la propuesta de comercializarlas online llegó justo en el momento indicado. Con su característico humor, la rubia dejó varias frases que rápidamente se viralizaron.
En diálogo con Puro Show, Luciana Salazar admitió que el principal detonante fue el exceso de ropa guardada. Según contó, no es de repetir outfits y eso hizo que, con el paso del tiempo, fuera generando un stock casi interminable de looks que ocupaban cada rincón de su vestidor. La idea de venderlos, confesó, le pareció “bárbara” desde el primer minuto.
La modelo detalló que llevaba años acumulando prendas de eventos, presentaciones y producciones fotográficas. Al recibir la propuesta de sumarse a una plataforma de venta de ropa usada, lo vio como una oportunidad para ordenar su vida y liberar espacio. Además, resultó un plan ideal para recuperar algo de dinero en un contexto en el que los gastos cotidianos se volvieron un desafío.
Entre risas, Luciana Salazar recordó un comentario que surgió en el piso del programa y que dio origen a una de sus frases más resonantes. “Como decían ahí, yo no las puedo llevar a una iglesia”, bromeó, haciendo alusión a los looks excesivamente osados que formaron parte de sus apariciones públicas.
La mediática aseguró que no le sorprendió el impacto de la noticia, ya que desde hace años su estilo marca tendencia y muchos fanáticos siguen de cerca cada detalle de su vestuario. Ahora, varios de esos atuendos ya pueden ser adquiridos por sus seguidores a través de esta iniciativa online.
Luciana Salazar también destacó que esta movida tiene un costado ecológico, ya que permite extender la vida útil de ropa que, de otro modo, quedaría archivada indefinidamente. Para ella, es una manera responsable y práctica de reorganizar su consumo.
A pesar del tono relajado con el que habló del tema, su decisión despertó curiosidad sobre su situación económica. Sin embargo, Luciana Salazar prefirió mantener el foco en la anécdota y en el costado divertido de desprenderse de sus prendas más icónicas.
Con la venta ya en marcha, la mediática se mostró entusiasmada con el proyecto y adelantó que seguirá subiendo piezas a medida que continúe la limpieza de su vestidor.