El nombramiento del cardenal estadounidense Robert Francis Prevost como el Papa León XIV generó un amplio abanico de reacciones en todo el mundo. El presidente estadounidense Donald Trump consideró "un gran honor" para su país tener al primer papa norteamericano. Por su parte la primera ministra italiana, Giorgia Meloni lo felicitó en una carta: “El mundo tiene una desesperada necesidad de paz”
A través de un mensaje en su cuenta de X, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, dijo que, “en este momento decisivo” para su país, el Papa continúe “con el apoyo moral y espiritual del Vaticano en el esfuerzo de Ucrania por restaurar la justicia y alcanzar una paz duradera”.
El presidente ruso, Vladímir Putin, dijo que confía en que con León XIV se mantendrá un diálogo constructivo, basado en los valores cristianos. “Estoy seguro de que el diálogo constructivo y la interacción que se ha establecido entre Rusia y el Vaticano se desarrollarán aún más sobre la base de los valores cristianos que nos unen”, declaró Putin.
En sus primeras palabras desde el balcón de la Basílica de San Pedro, León XIV lanzó "un llamado a la paz" e instó a "construir puentes" mediante el "diálogo", marcando una continuidad con la línea de su predecesor Francisco. Este mensaje ha sido recibido con particular interés por gobiernos como el español, que a través de su ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, garantizó una relación "de cooperación, lealtad, respeto y diálogo" con el nuevo papa, a quien consideran en sintonía con el legado de Francisco, sugiriendo que el nuevo pontífice mantendrá posiciones progresistas en temas sociales y políticos. En esa linea, Gustavo Petro de Colombia expresó su esperanza de que el nuevo pontífice defienda a los migrantes latinoamericanos "humillados" en Estados Unidos, evidenciando las tensiones inherentes al origen del nuevo líder católico.
La elección de Prevost, de 69 años, adquiere especial relevancia en el contexto geopolítico actual, con su doble nacionalidad estadounidense y peruana siendo vista como una ventaja estratégica. La presidenta peruana Dina Boluarte destacó que el nuevo papa "se nacionalizó peruano como expresión de su profundo amor por el Perú", mientras que el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu expresó su deseo de que el pontífice fomente "la esperanza y la reconciliación entre todos los creyentes", un mensaje significativo en medio de los conflictos en Medio Oriente que el Vaticano ha intentado mediar.
La Unión Europea saludó al nuevo Papa y espera que León XIV promueva “valores compartidos” y “alentar la unidad” en el mundo. “Millones de europeos se inspiran diariamente en el compromiso permanente de la Iglesia con la paz, la dignidad humana y el entendimiento mutuo entre las naciones”, han señalado la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, António Costa, en un mensaje conjunto.