Maestro abusador: qué dijo la Policía de sus lesiones

El docente de música del jardín 31 imputado por 17 casos de abuso sexual contra niños de 4 y 5 años, solo pudo permanecer 20 minutos con detenidos de su misma condición en la comisaría 18, ya que fue solicitada asistencia médica porque presentaba una herida punzante en el abdomen. Según la Policía provincial (en coincidencia con lo dicho por los seis presos que estuvieron con él), se la autoprovocó. Debido al riesgo que corre su integridad física, la jueza de Garantías Carina Álvarez, quien le dictó seis meses de prisión preventiva, dispuso que Walter Herrera quede bajo la custodia de una fuerza federal. Es que entre los padres que lo denunciaron por los abusos sexuales, al menos uno es integrante de la policía provincial.

Herrera, quien el martes estuvo a punto de ser linchado en su vivienda de Planas casi Pinamar por decenas de padres, cuenta con la defensa oficial de Verónica Zingoni.

El comisario inspector, coordinador de la Dirección Seguridad, Sergio Ranguimán, en diálogo con Mitre Patagonia reveló cómo, según su versión, ocurrió el episodio.

“Pasadas las 21 de ayer (miércoles), luego de la formulación de cargos en la que le impusieron seis meses de prisión preventiva, fue trasladado a una comisaría. Pasadas las 21.20 se lo ingresó a la alcaidía. Tuvo una convivencia con seis internos también vinculados a delitos sexuales. Pero 20 minutos después los internos pidieron asistencia médica para el docente”, explicó.

Ranguimán señaló que se aplicó el protocolo consistente en aislar a la población penitenciaria, se solicitó una ambulancia de emergencias y el médico que lo revisó constató que presentaba una herida punzante en el abdomen, pero –aclaró- “no revestía gravedad”.

Pese a que el médico sostuvo que no era necesario su traslado a ningún centro asistencial, como Herrera se quejaba de dolores en el rostro por algunas lesiones, el director de la unidad “dispuso que sea trasladado al hospital Heller y luego al Castro Rendón”. Tras su revisación médica, “se lo llevó a otra dependencia” para que cumpla con la prisión preventiva.

Dijo Ranguimán que” el resto de la población carcelaria declaró que esa lesión fue “autoinfligida” y que, incluso, en una requisa posterior “se encontró un clavo” que “se presume podría haber sido el usado para esa lesión”. En síntesis, la Policía provincial sostiene la teoría de que Herrera se lesionó a sí mismo.

De todas maneras, la jueza Carina Álvarez, quien en la audiencia de formulación de cargos le dictó seis meses de prisión preventiva por los 17 casos de abuso sexual que aceptó imputarle, dispuso que de aquí en adelante la seguridad para el detenido sea responsabilidad de fuerzas federales. Y ni el fiscal Manuel Islas ni la defensora Zingoni ni el querellante Gustavo Lucero se opusieron.