El turismo en Argentina está enfrentando desafíos de cara a la temporada de verano 2024, según datos de los informes turísticos. En el sector manejan una reducción en comparación con años anteriores debido a varios factores: altos niveles de inflación, falta de poder adquisitivo, e incertidumbre con respecto a las medidas económicas.
Esta situación llevó a una disminución en el número de turistas nacionales que eligen vacacionar dentro de territorio argentino. En destinos como Las Grutas, las reservas apenas llegaron al 50%, cifra bastante menor al 80%, o hasta el 90% que había en el verano del año pasado. Muchos prestadores de servicio inmobiliario evalúan cerrar el 31 de enero para evitar pérdidas.
En Mar Del Plata la ocupación fue del 85%, un 10% menos de lo que fue en enero 2023. Mientras que en Córdoba, las ocupaciones no llegaron al 50% generando preocupación en los hoteleros.
Los expertos en el rubro señalan que los turistas argentinos planifican sus vacaciones sobre la fecha, con menos tiempo de anticipación y a la espera del impacto que pueda tener el DNU, la Ley Ómnibus y el aumento en los combustibles, dentro de la economía nacional.
Otros destinos, como El Calafate, Bariloche, Mendoza, Neuquén y Salta aguardan el comienzo del verano para analizar los resultados en las reservas y el movimiento turístico, lugares que en muchos casos se destacaron por ser las vedettes de la época del plan Pre Viaje.
En el sur los extranjeros incidirán sobre los ingresos finales, motivados por el valor del dólar. Puerto Madryn, aguarda el comienzo de la temporada con las expectativas puestas en que los turistas argentinos decidieran ir a vacacionar sus playas, pero el porcentaje de visitas se dinamizarán por la época plena de cruceros que llegarán aquí entre el 2 y el 9 de enero, con casi 10 mil personas a bordo entre pasajeros y tripulación.