El papelón futbolístico del Inter de Milán en el Mundial de Clubes fue solo el principio. Después de la sorpresiva eliminación ante Fluminense, el verdadero partido se empezó a jugar puertas adentro, con declaraciones cruzadas, indirectas y hasta reproches públicos.
La historia viene así: Calhanoglu terminó la temporada con una lesión, pero igual fue convocado al Mundial de Clubes. No jugó ni un minuto y fue desafectado tras la fase de grupos por cuestiones físicas. Pero lo que desató la bronca en el vestuario fueron las fotos que subió ayer de sus vacaciones en la playa, en plena eliminación del equipo.
El gesto cayó muy mal entre sus compañeros, que lo sintieron fuera del compromiso. Por eso, no extrañó que tras el partido, Lautaro Martínez explotara en zona mixta: “Aquí tienes que querer quedarte. El que se quiera quedar, que se quede, el que no, que se vaya. He visto muchas cosas que no me han gustado”. Aunque no dijo nombres, el presidente del Inter, Marotta lo confirmó sin vueltas: "Se refiere a Calhanoglu"
Aunque no dijo nombres, el presidente del Inter, Marotta lo confirmó sin vueltas: "Se refiere a Calhanoglu"
Pero lejos de calmar las aguas, el turco respondió de inmediato y en caliente. Subió una historia en Instagram apuntando directamente a su capitán: “Lo que más me dolió no fue perder, fue lo que vino después. Palabras que dividen, no que unen”.
Luego en entrevista, el mediocampista fue todavía más filoso: “Un verdadero líder no busca culpables. Siempre estuve con el equipo, viajé igual aún lesionado. Pero nunca traicioné esta camiseta”. Y agregó con tono desafiante: “Mis elecciones hablan por mí. Yo elegí quedarme cuando pude irme. No necesito demostrarlo en redes”.
Así es que el Inter quedó no solo eliminado de un torneo internacional, sino también partido al medio. Mientras los hinchas intentan entender qué pasó en la cancha, los jugadores ya juegan otro partido, el de los egos, las lealtades y los pases de factura públicos.