Este miércoles, Wanda Nara y Mauro Icardi volvieron a encontrarse cara cara tras un largo tiempo, y lo hicieron en Milán, ciudad en la que se está llevando adelante su divorcio, el cual definirá lo que pasará con el patrimonio de la expareja.
En este contexto, los primeros trascendidos indican que, además de mostrarse los videos que comprobaban la infidelidad con Keita Baldé, el futbolista habría pedido la "tenencia" de sus hijas -algo que ya se había tratado el juez italiano y sobre lo cual dio como competente a la Justicia de Argentina, por lo cual eso se definirá en terreno latinoamericano-, y ambas situaciones habían dejado completamente angustiada a la blonda.
“En la audiencia, (Mauro) llegó a decir que quería vivir con Francesca, Isabella y Eugenia Suárez”, expresó la conductora, ratificando que todo era “para lastimar a Wanda”, dieron a conocer en el ciclo Sálvese quien pueda (América TV).
Sin embargo, lejos de esta versión que además agregaba fuertes peleas y gritos, la empresaria y el futbolista se mostraron muy cómplices y hasta se unieron en una risa previo a despedirse, una vez finalizada la audiencia.
Las imágenes exclusivas se mostraron en el programa a cargo de Yanina Latorre, quien aprovechó la oportunidad para compartir su opinión sobre el encuentro: “Acá no hay odio. Se van juntos, relajados. Se miran. Se matan de risa post audiencia”, insistiendo en la posibilidad de que Wanda y Mauro volverán a estar juntos en el futuro.
En tanto, y pensando en lo que dirá la nueva novia del deportista, Latorre cerró: “Cuando la China Suárez vea esto, pone el grito en el cielo”.