Con el objetivo de evitar una nueva paralización del transporte aéreo justo en el inicio de las vacaciones de invierno, el Gobierno anunció este martes la conciliación obligatoria en el conflicto que mantiene la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) con las empresas del sector.
La medida suspende el paro previsto para el próximo viernes 19 de julio y abre un periodo de negociación de 15 días entre las partes. La Secretaría de Trabajo, dependiente del Ministerio de Capital Humano, comunicó oficialmente la decisión: “El Ministerio de Capital Humano, a través de la Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, dictó la conciliación obligatoria ante las medidas de fuerza informadas por la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), que abarcarían a todas las empresas y comprenderían a todos los pilotos”.
El pedido de intervención estatal fue realizado formalmente por Aerolíneas Argentinas, una de las compañías más afectadas por la convocatoria gremial, y gestionado a través de la Cámara de Líneas Aéreas de la República Argentina (CLARA). Tras analizar la situación, el Gobierno optó por la misma estrategia utilizada días atrás con los controladores aéreos, quienes también habían anunciado un paro y se vieron obligados a desistir.
Desde APLA exigían una recomposición salarial urgente en medio del deterioro del poder adquisitivo, y habían programado la huelga para el viernes 19, fecha clave en el recambio turístico de invierno. De haberse concretado, la medida habría paralizado vuelos de cabotaje e internacionales, afectando a miles de pasajeros en uno de los momentos más sensibles para la actividad aérea.
La conciliación obligatoria implica la suspensión inmediata de cualquier medida de fuerza y la obligación de ambas partes de sentarse a negociar durante los próximos 15 días hábiles. Durante este período, los vuelos deben operar con normalidad, aunque los pilotos podrán retomar la protesta si no se alcanzan acuerdos concretos.
Este conflicto se inscribe en un contexto de creciente tensión entre el sector aeronáutico y el Gobierno. APLA, junto con otros gremios del sector, habían denunciado retrasos salariales y “falta de respuesta” por parte de las empresas, además de criticar la política oficial hacia Aerolíneas Argentinas y la ausencia de garantías para mantener condiciones laborales en la compañía estatal.
Con la medida de fuerza suspendida temporalmente, se abre una nueva etapa de diálogo donde el Gobierno apuesta a desactivar el paro y preservar la normalidad en la temporada invernal, mientras los sindicatos evalúan si logran mejoras en sus condiciones laborales.