Los fundamentos mencionan que la planta tiene beneficios terapéuticos que la medicina tradicional no tiene y agregan que tuvo resultados positivos en el tratamiento de ciertas afecciones como evitar la náusea producida por la quimioterapia o los dolores producidos por la esclerosis múltiple.
En tanto, señalan que el aceite cannábico reduce significativamente los ataques epilépticos refractarios y mejora la calidad de vida de los pacientes con parkinson, como así también la psoriasis y la colitis ulcerosa.
Y remarcan que la propuesta del uso terapéutico del cannabis se recetará bajo control médico para pacientes con sintomatología que no respondan a otro tipo de pautas terapéuticas.