En el barrio Mudon, en la escuela 289, nuestro periodista Emi Romer indagó sobre la intoxicación que recibieron alumnos y un auxiliar de servicios. A raíz de eso, se vieron afectados por dolores de cabeza y otros síntomas importantes.
Si bien la empresa había señalado que tres horas después de la fumigación los efectos de los productos se diluían "el martes tuvimos esos casos. Incluso una docente tuvo principio de envenenamiento, ya que se le adormecía la lengua y tenía problemas en el habla". Y hoy "hasta un auxiliar de servicios tuvo esos síntomas", agregó.