El crecimiento de las ciudades, como todo avance, acarrea sus beneficios y sus complicaciones. Urbes como la de Neuquén y otras ciudades del país, que ya asoman en varios cientos de miles de pobladores, se vuelven un nudo por momentos violento para su recorrido. En calles diseñadas en otro siglo, deben convivir ahora autos de todo tipo, motos, bicis, colectivos, monopatines, trenes y peatones. Como en los terrenos céntricos se fueron acumulando construcciones para albergar a cientos de personas, en las arterias la convivencia en la circulación también se ha vuelto un escenario por momentos caótico e irrespetuoso.
Parece ser que, en Neuquén, “ya no importa nada y todos se manejan como quieren”. Así lo afirman vecinos de la capital que hacen llegar sus indignantes postales a la redacción de Mejor Informado, con respecto al tránsito en la ciudad. Y, en este aspecto, “no se salva nadie”.
Ciclistas que no utilizan las bicisendas, peatones que caminan por las bicisendas, peatones que cruzan la calle en diagonal, sendas peatonales bloqueadas por autos estacionados, automovilistas que no respetan las velocidades máximas y tampoco ceden el paso a los peatones, semáforos mal sincronizados, rampas que no pueden ser utilizadas, veredas destruidas que no pueden ser caminadas, falta de señalización, el colectivero que no puede frenar por la camioneta en doble fila con balizas, la tortura de familiares a la salida del colegio, la cantidad de minutos perdidos para encontrar estacionamiento, el tren que no puede avanzar porque alguien estacionó sobre las vías… Y, la lista que, ya enumera 14 situaciones (algunas cotidianas), podría seguir.
Justamente, el último hecho mencionado es uno de los que más indignación ha generado en los últimos días. El Tren del Valle, llegó en la tarde de este jueves, solamente; hasta calle Lainez. No puedo seguir viaje porque había vehículos estacionados, casi, sobre las vías. La pelea entre autos y trenes.
Hace un tiempo, se publicó aquí la crónica de una ciclista que padeció para circular por la ciudad por el conflicto con vehículos, motos y peatones. El round de bicis con el resto de la circulación.
También es usual que se comuniquen los autos o camionetas estacionados en las rampas o en los ingresos a garajes, las competencias de motos en madrugada, la desatención al rojo de los semáforos en la avenida Mosconi, entre tantos conflictos cotidianos.
Pareciera que todo el mundo tiene razón y, a la vez, todos los habitantes estamos en falta. Ponerse de acuerdo, ser respetuosos de las normas y hacer lugar a las diferentes movilidades tendrá que ser prioridad, porque todos deben andar y todos deben llegar a destino.