Este último fin de semana, dejó números alarmantes en cuanto a siniestros viales, al menos tres fueron graves, uno en Arroyito, zona La Rinconada, por el desmoronamiento de piedras hacia la ruta. Mientras que en Plottier, el accidente tuvo como resultado una victima fatal.
El 90% de los accidentes sucedieron por conductas humanas, como manejar a altas velocidades, con cansancio, en estado de ebriedad o por distracciones por el uso de dispositivos electrónicos. El otro 10% sucedieron por realizar sobrepasos en curvas. “Muchos siniestros en zonas urbanas, son porque nadie respeta las máximas de velocidad, que son de 40 kilómetros”. subrayó Lucas Gómez, subsecretario de seguridad.
Con el objetivo de reducir la siniestralidad en la provincia, Seguridad Vial lleva adelante diferentes acciones preventivas, como el caso de los controles de alcoholemia regulares, los operativos y asistencia a conductores en ruta, los refuerzos de móviles en época de turismo. Con respecto a esto, Gómez declaró “nuestro objetivo es lograr mejores conductores, con los mismos parámetros de evaluación y unificando los procesos”.
Por último, el subsecretario de seguridad comentó que cada vez se ve más la incidencia de alcohol en los siniestros viales. “Comparando el inicio de este año, con el anterior hubo un aumento en los siniestros por consumo de alcohol, pero se redujo un 37% la tasa de mortalidad”.
La seguridad vial no ha recibido la atención suficiente ni en el plano internacional, ni mucho menos en el ámbito nacional. Las razones son la falta de concienciación general y de información específica sobre la magnitud del problema, los costos sanitarios, económicos y sociales de las colisiones en la vía pública, y las intervenciones que pueden prevenir los choques o reducir el daño que ocasionan, perjudicando la vida propia y la de los demás.