En la últimas horas, trabajadores de la Planta Industrial de Agua Pesada (PIAP) intensificaron su reclamo en la Legislatura neuquina para pedir la reactivación de la planta. El contrato de acondicionamiento debió haberse firmado a comienzos de este año entre las autoridades de Empresa Neuquina de Servicios de Ingeniería (ENSI) y la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA).
"Más allá de los anuncios mediáticos por parte de Nación y de Provincia, la realidad es que hasta el día de hoy no tenemos ninguna solución. Actualmente, somos 117 trabajadores que nos encargamos en el mantenimiento de la planta y se tendrian que sumar otros 100 con este nuevo contrato, aunque todo se está dilatando", explicó el delegado de los trabajadores de la PIAP, Nicolás Ventura, en diálogo con AM550 y CN24/7.
El delegado gremial contó que son 450 toneladas de agua pesada que se tienen que mantener para las tres centrales nucleares que están funcionando en el país.
"Los responsables de la firma de este contrato es CNEA. Mantuvimos reuniones con las autoridades y nos dicen que 'el mes que viene se firma' y estamos en esta situación hace meses", agregó Ventura.