Con la finalización de la Copa América y Eurocopa algunos jugadores comenzaron a perfilarse como posibles candidatos al Balón de Oro. El premio creado por la revista francesa, France Football, es uno de los reconocimientos más importantes del año y se otorga al futbolista destacado de la temporada.
Uno de los que ya hizo valer su voz ante la inminente selección de postulantes es el mediocampista italo-brasileño Jorginho, que recientemente se consagró campeón de Europa con Italia tras vencer a Inglaterra en la tanda de penales.
El futbolista de 29 años consideró en declaraciones a medios italianos, que es un serio candidato a ganar el Balón de Oro que se entregará en diciembre, al asegurar que lo ha ganado todo este 2021 tras alzar la Champions League con el Chelsea el pasado 29 de mayo.
“Vivimos para los sueños. Pero seré lo suficientemente honesto: depende del criterio que se tenga a la hora de asignarlo. Si hablamos de talento, soy consciente que yo no soy el mejor del mundo, en cambio si tú eliges en base a los títulos, bueno, nadie ha ganado más que yo esta temporada”, reconoció.
Sin embargo, entendiendo la calidad que tienen los nombres contra los que podría competir por el máximo galardón individual, explicó: “¿Cómo me voy a comparar con Messi, Cristiano Ronaldo o Neymar? Tienen características completamente diferentes a las mías, pero repito, depende de los criterios”.
El volante, de gran presente en el conjunto de Thomas Tuchel y Roberto Mancini ganó los dos títulos más importantes del continente. En comparación con los otros tres cracks mundiales, sólo Lionel Messi podría competirle tras haber levantado la Copa América en Brasil, además de una Copa del Rey en el campeonato local. Sin embargo, tanto el argentino, como el portugués y el brasileño fueron eliminados de la Champions y no lograron conquistar el título de liga con sus respectivos clubes.
Sobre el hecho de representar a Italia, el oriundo de Santa Catarina (Brasil), reconoció que, “no lo pensé dos veces. Después de la Sub 21, había jugado con la selección italiana solo partidos amistosos. En noviembre de 2017, la convocatoria para el ‘play-off’ mundial con Suecia llegó pero en ese momento Brasil también me había buscado. Era mi sueño. Jugar desde niño con Brasil. Pero sentí que Italia necesitaba ayuda, ese juego fundamental se estaba jugando con Suecia. Y cuando necesité ayuda, Italia me ayudó, me abrazó y me abrió las puertas. No me sentía cómodo dándole la espalda. Mi corazón dijo ‘No, Italia te necesita’. Así que tomé esa decisión y, sinceramente, estoy muy contento con ella”.