En la recta final del año, las predicciones del Horóscopo Chino vuelven a tomar protagonismo. Con noviembre avanzando y diciembre a la vuelta de la esquina, Ludovica Squirru ofreció una nueva lectura del clima energético que atravesarán distintos signos. Según la reconocida astróloga, el cierre del ciclo 2025 no será liviano: la salud y los vínculos afectivos se convertirán en los grandes focos de tensión y aprendizaje.
Ludovica Squirru advirtió que noviembre llega con una carga emocional más intensa de lo habitual. Para algunos, será un período para poner límites; para otros, una invitación a frenar impulsos que podrían desembocar en decisiones erradas. La astróloga subrayó que el amor no transitará un camino sencillo y que varios signos deberán manejar situaciones incómodas o desgastantes en el plano sentimental.
Uno de los casos más delicados es el del Chancho. Según la interpretación de Ludovica Squirru, quienes pertenecen a este signo tendrán que aceptar la impermanencia y reconocer cuándo una relación ya no aporta bienestar. Entre los más jóvenes podrían aparecer dramas propios de la vida afectiva, mientras que los adultos deberán cuidar especialmente su salud, en particular huesos y movilidad, para evitar accidentes que puedan complicar el mes.
Para la Rata, noviembre traerá sensaciones contrastantes. La astróloga describió un período equilibrado, aunque no exento de tentaciones y riesgos. Quienes habiten en zonas del sur estarían más expuestos a aventuras impulsivas en lo social y lo sexual, mientras que en el norte el clima será más calmo. Aun así, la prudencia será indispensable para evitar choques innecesarios.
El Conejo, por su parte, deberá trabajar la paciencia. La inquietud emocional podría afectar tanto el cuerpo como el ánimo, por lo que se recomienda prestar atención a la alimentación y evitar excesos. Squirru enfatizó la importancia de regular las rutinas de ejercicio y sumar prácticas de respiración o meditación que ayuden a reordenar el eje interno.
En su análisis general, la astróloga anticipó que noviembre puede convertirse en un terreno movedizo. La ansiedad, la falta de descanso y los enredos afectivos podrían llevar a respuestas precipitadas. Por eso, remarcó la necesidad de bajar el ritmo y sintonizar con las señales del cuerpo antes de avanzar.
Finalmente, Ludovica Squirru señaló que los desafíos serán distintos para cada signo, pero la advertencia es común: será un mes para proteger la salud, resguardar las emociones y actuar con claridad. El amor, lejos de quedar fuera del mapa, será un escenario sensible donde la exposición será inevitable.