Una vez más, Yanina Latorre dejó a todos boquiabiertos con una confesión explosiva durante su participación en el programa “Sálvese quien pueda”. Sin rodeos y con su estilo frontal, la panelista contó una anécdota íntima que involucra a dos figuras muy conocidas del espectáculo argentino: El Polaco y Silvina Luna.
La esposa de Diego Latorre relató que, durante una fiesta en tiempos del Bailando, fue sorprendida con una inesperada propuesta por parte de la entonces pareja. Según sus palabras, ambos intentaron seducirla para tener un encuentro íntimo de a tres. “Cuando estaban de novios me ofrecieron un trío. Real. Me escapé”, lanzó sin filtros, provocando risas y asombro en el piso.
Yanina Latorre recordó que durante esa edición del Bailando por un sueño bromeaba constantemente con su atracción hacia El Polaco. “Yo siempre decía que me encantaba en el Bailando. Es sexy, es dable. Pero nunca fue con intención de robarle el novio a Silvina Luna”, aclaró, dejando en claro que no tenía segundas intenciones.
La propuesta ocurrió en una noche cargada de fiesta y baile. Según relató, se encontraba en un sector VIP junto a Jey Mammon cuando de pronto fueron abordados por Silvina y El Polaco, quienes comenzaron a bailar muy cerca de ella, insinuándose con clara intención. “Me empezaron a acorralar los dos y yo pensaba: ‘¿Esto qué es? ¿Qué estoy haciendo?’”, relató entre carcajadas.
La tensión del momento la llevó a tomar una decisión inmediata. “Le dije a Jey ‘huyamos’ y nos fuimos”, contó, mientras sus compañeros no podían creer lo que estaban escuchando. La anécdota generó una oleada de comentarios en redes, donde muchos destacaron el desparpajo con el que Yanina Latorre suele contar sus experiencias.
Como suele ocurrir, la panelista no tuvo problema en burlarse de sí misma y reconoció que sus propios chistes y guiños en televisión quizás provocaron el malentendido. “Tanto que jodí, tanto que jodí... después pasan estas cosas”, reflexionó entre risas.
Aunque la situación podría haber sido incómoda, Yanina Latorre la compartió con total soltura, reafirmando su lugar como una de las voces más sinceras y filosas del espectáculo. Su relato no solo sorprendió, sino que también expuso una faceta inesperada de aquella recordada pareja mediática.
Lo cierto es que, lejos de tomárselo con seriedad o dramatismo, Yanina Latorre convirtió una anécdota subida de tono en una historia divertida que dejó a todos con la boca abierta. Su capacidad para reírse de sí misma y contar todo sin filtro sigue siendo su marca registrada.