En una visita reciente al programa Otro día perdido, conducido por Mario Pergolini, Joaquín Furriel sorprendió a todos al relatar un accidente doméstico que, lejos de ser solo doloroso, se convirtió en una prueba de su temple como padre y como actor. El intérprete reveló que, en medio de un juego con su hija Eloísa, terminó con una vértebra fracturada, pero su prioridad fue evitar que la pequeña se asustara.
El episodio ocurrió cuando Eloísa, fruto de su relación con Paola Krum, tenía apenas siete años. Todo empezó como una tarde de juegos y risas hasta que una caída inesperada desde la cama terminó de la peor forma: “Se me quebró la vértebra dorsal 12”, relató Joaquín Furriel, todavía sorprendido por el recuerdo. El impacto fue tan fuerte que quedó tendido en el suelo, sin poder moverse.
Lejos de dejarse vencer por el dolor, Joaquín Furriel improvisó una escena digna de cualquier guion. Justo en ese momento, como si la situación no pudiera complicarse más, llegó el delivery con la pizza que habían pedido. Entre la respiración entrecortada y la preocupación de su hija, el actor decidió ponerse en personaje y tranquilizarla: “Yo le decía ‘no pasa nada, estoy bien’. Le actué todo”, contó entre risas.
Para sostener la farsa, padre e hija se sentaron a comer la pizza como si nada grave hubiera sucedido. Joaquín Furriel disimuló el dolor y ocultó la gravedad de la situación hasta que, ya más tranquilo, pudo hacerse revisar. “Duele muchísimo. Sentís que te quedás sin aire. Pero yo me la banqué, porque al otro día tenía que grabar”, explicó. Lo que parecía un golpe menor terminó con un corset y reposo obligado.
Aunque suene increíble, no fue la primera vez que Joaquín Furriel se vio obligado a disimular situaciones incómodas para proteger a su familia. Con una trayectoria consolidada en teatro, cine y televisión, el actor confesó que suele separar sus problemas personales del rol de padre para que su hija pueda crecer tranquila y sin preocupaciones innecesarias.
Además de esta anécdota, Joaquín Furriel atraviesa un momento personal particular. Hace algunos meses, se supo que su relación con Guillermina Valdés llegó a su fin. Después de casi un año juntos, ambos optaron por seguir caminos diferentes. El propio actor confirmó la noticia en diálogo con Socios del Espectáculo.
Sin rodeos, Joaquín Furriel aseguró que el vínculo terminó en buenos términos. “Nos conocimos, empezamos a compartir cosas, pero no funcionó”, comentó, evitando entrar en detalles que considera íntimos. Con la discreción que lo caracteriza, explicó que no ve necesario exponer aspectos privados.
A pesar de la separación, el vínculo entre ellos no quedó roto. Según el actor, mantienen una relación cordial y de respeto mutuo. “A veces nos hablamos, la quiero mucho. Todas las personas que uno cruza en la vida tienen un valor”, reflexionó Joaquín Furriel, mostrando que, tanto en el amor como en la vida, sabe seguir adelante.