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Bendita sin conductor y panelistas: revelan escándalo similar en Intrusos

El conflicto en Bendita llevó a que el programa saliera al aire solo con informes. En Intrusos, Paula Varela contó una polémica interna que casi provoca la salida del equipo, mientras Pallares recordó condiciones precarias en una temporada.

Por Redacción

Viernes, 01 de agosto de 2025 a las 00:55
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La polémica en el programa Bendita explotó la semana pasada cuando debido a un fuerte enfrentamiento con Beto Casella, el ciclo salió al aire sin conductor ni panelistas, transmitiendo únicamente informes. Esta situación generó sorpresa y debates en el mundo de la televisión.

Durante una emisión de Intrusos, Paula Varela comentó que un hecho similar no se había registrado en América, el canal donde se emite su programa. Sin embargo, la panelista sorprendió al revelar que en Intrusos sí vivieron una situación parecida que casi termina en despidos.

"Eso una vez acá pasó -se sinceró Paula-. Era fin de año, no habíamos firmado contrato y ya se acercaba el primero de enero. El gerente estaba en Punta del Este. Así que Polino, Gómez Rinaldi y yo, bueno nos pusimos firmes, y Ventura que estaba conduciendo, dijo ‘estoy del lado de ustedes, pero tengo que hacer el reemplazo’. La conclusión es que ¡Casi nos echan!”

Marcela Tauro agregó que finalmente lograron salir al aire, pero el conflicto había generado un gran lío. “Al final nosotros salimos al aire ¡Pero se armó un lío bárbaro! Así que ahí uno aprende que la tele es la tele”, comentó.

Por su parte, Adrián Pallares recordó otra experiencia difícil en 2007, cuando junto a Rodrigo Lussich y Ángel de Brito fueron enviados a hacer la temporada de "Los Profesionales" en Mar del Plata. “Nos mandaron a un departamento de dos ambientes que ni siquiera tenía tres camas. Había una grande y una chica, tuvimos que pedir una extra”, relató.

Pallares explicó que mientras los gerentes del canal estaban en un lugar exclusivo, ellos quedaron en condiciones precarias. “Pataleamos un poco y nos dieron algunas cosas pero estuvimos un mes hacinados. Al final, siempre gana la empresa”, cerró la anécdota.

Estas confesiones abren una ventana sobre las tensiones internas y las dificultades que enfrentan los equipos de televisión, aún en canales de renombre, y reflejan que los conflictos detrás de cámaras pueden ser tan intensos como los que se viven al aire.

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