Al menos 126 personas murieron en un terremoto de magnitud 6,2 en una región fría y montañosa del noroeste de China. Se están llevando a cabo operaciones de búsqueda y rescate en la provincia de Gansu y en la vecina provincia de Qinghai. El terremoto dejó más de 500 heridos, dañó casas y rutas y cortó líneas eléctricas y de comunicación.
La emisora estatal CCTV dijo que más de 100 personas murieron en la provincia de Gansu y otras 11 en la vecina provincia de Qinghai en el terremoto, que ocurrió a una profundidad de 10 kilómetros poco antes de la medianoche de ayer.
El terremoto se produjo en el condado de Jishishan de Gansu, a unos 5 kilómetros de la frontera provincial con Qinghai. El epicentro estuvo a unos 1.300 kilómetros al suroeste de Beijing, la capital china.
Más de 300 personas habían sido atendidas por heridas hasta la madrugada, dijo CCTV. Al menos 140 personas resultaron heridas en Qinghai y otras 96 en Gansu, según CCTV y la agencia oficial de noticias Xinhua.
Se estan enviando tiendas de campaña, camas plegables y edredones a la zona del desastre, dijo CCTV que también citó al líder chino Xi Jinping pidiendo un esfuerzo total de búsqueda y rescate para minimizar las víctimas fatales. La temperatura mínima durante la noche en el área fue de -15 a 9 grados Celsius (5 a 16 grados Fahrenheit), dijo la Administración Meteorológica de China.