Una explosión en un restaurante en la ciudad china de Yinquan en el noroeste del país provocó la muerte de al menos 31 personas. Otras siete resultaron heridas y una de ellas permanece en estado crítico. El presidente de China, Xi Jinping, exigió atención médica urgente para los heridos y una revisión de seguridad después de la explosión, dijo la agencia oficial de noticias Xinhua.
La explosión se produjo alrededor de las 8:40 de la noche del miércoles en una concurrida calle en Yinchuan, la capital de la región autónoma tradicionalmente musulmana de Ningxia Hui, mientras la gente se reunía antes del Festival del Bote del Dragón,
Según se informó, el estallido fue por una fuga detectada en un depósito de gas licuado del restaurante. El fuego logró ser extinguido en menos de una hora, aunque el centenar de bomberos y miembros de equipos de rescate desplazados a la zona han estado trabajando hasta las cuatro de la madrugada de este jueves.
Una hora antes de la explosión, los empleados notaron el olor a gas para cocinar y descubrieron que la válvula de un tanque de gas estaba rota, según Xinhua. La explosión ocurrió mientras un empleado estaba reemplazando la válvula.
Imágenes de la escena muestran numerosos vehículos de bomberos y emergencias desplegados ante un edificio del que sale una gruesa columna de humo denso. Se ven destrozos en la fachada, camillas transportando cuerpos y se escuchan gritos de dolor.
Nueve personas han sido detenidas por las autoridades, entre ellas el dueño del restaurante, accionistas y empleados. Sus activos también han sido congelados, según Xinhua.