Ya se mataron dos pibes en Allen y las picadas siguen

Picadas clandestinas en lugares conocidos. Motos y jóvenes arriesgados. ¿No existe solución con los pisteros?. Una pregunta que aún no encuentran su respuesta las distintas autoridades municipales y policiales, tanto de Neuquén cómo en Río Negro. Esta situación, despierta cruces, entredichos, broncas y culpas entre quienes deben responsabilizarse por ejercer los controles.

Mientras tanto, la falta de una respuesta concreta habilita zonas liberadas que exponen no solo la propia, sino también la de terceros.

En Allen, sucede algo similar a lo que sufren los vecinos de Avenida Olascoaga, aquí en la ciudad. Puntualmente en Ruta 22, acceso a la localidad, más conocido con el canal de camioneros “Martin Fierro”.  Las carreras son clandestinas, pero el lugar es muy conocido, no solo por los jóvenes que se acercan, sino también por las autoridades municipales. El pasado sábado unas 100 motos corrieron carreras, desde las 12 del mediodía hasta que cayó el sol.

PICADAS Y MUERTE EN EL MISMO LUGAR

Cabe recordar que, en el mismo lugar, en septiembre del 2017, dos adolescentes de 15 y 16 años se mataron. Circulaban en una moto que intentó superar a un camión cuando el vehículo mayor giraba. Uno falleció en el acto y el otro más tarde en Roca. No llevaban casco ni documentación personal. Un arriesgado sobrepaso del rodado menor por la derecha del camión, que justo giraba en un cruce, habría desencadenado el fatal hecho de tránsito. Todo sucedió el acceso Martín Fierro y la intersección con la Ruta 65, a la altura de la empresa de verificación técnica vehicular. Allí, un camión Mercedes Benz con chasis circulaba de sur a norte por el acceso y al llegar al cruce, giró hacia la derecha para tomar la 65. Después, la fatalidad dejó el peor escenario. Justo cuando el camión giraba y por el lado de la derecha (por adentro y contra la banquina), una moto con dos ocupantes a bordo intentó sobrepasarlo y terminó impactando contra el tanque de combustible del Mercedes Benz. El camionero, que se estima circulaba a muy baja velocidad, ni siquiera alcanzó a completar la maniobra y enderezar el camión cuando accionó los frenos del rodado. Pero nada pudo hacer porque las ruedas del chasis habían aplastado a los dos adolescentes que se trasladaban sin casco en una moto marca Corven 110 cm³.