RÍO NEGRO INSEGURO
Cómo iba a escapar Chiqui Forno, el líder de la Mega Banda
Como en las viejas épocas, encontraron dos túneles debajo de la celda del ex empleado judicial José "Chiqui" Forno.Como en los viejos tiempos, cuando la cárcel de Roca era casi un colador subterráneo por la cantidad de túneles que había, otra vez las autoridades encontraron excavaciones para ser utilizadas para escapar. Ambos arrancaban debajo de la celda 8 del pabellón 2, justo donde está alojado el líder de la Mega Banda, el ex empleado judicial cipoleño José "Chiqui" Forno. En marzo, también estuvo involucrado en un motín e intento de fuga.
Si bien no hay certezas por parte del Servicio Penitenciario de Río Negro y tampoco desde la Justicia, se supo de manera extra oficial que durante el fin de semana y en una inspección de rutina, el personal detectó dos túneles que tenían como destino distintos lugares dentro del Establecimiento de Ejecución Penal 2 de Roca.
Desde que se construyó la cárcel más grande de Río Negro, quedó demostrado que el terreno donde está asentada no cumple los requisitos para garantizar la seguridad. Es que es en su gran mayoría es suelo arenoso y otro parte de relleno. Por lo cual, luego de romper la capa de hormigón, la excavación no resulta muy compleja. Aunque, existe un peligro real de derrumbe de cualquier túnel.
Lo que se sabe de este descubrimiento es que uno de los túneles estaba listo para ser utilizado. En cambio, el otro estaba en construcción y tenía una extensión de 10 metros. Uno de ellos tenía como destino el polideportivo y el otro un patio interno del penal ubicado en la zona norte de Roca.
En la celda donde se encontraron las excavaciones está detenido el líder de la denominada Mega Banda, a la que se le atribuyen entraderas y boquetes en todo el Alto Valle. Forno fue condenado a 30 años de prisión por asociación ilícita y ocho robos agravados.
El recluso ya había estado vinculado a un intento de fuga este año. En marzo, le negaron la salida para asistir al entierro de su mamá y armó un motín en el que quedaron expuestas las pésimas condiciones de seguridad que tiene la cárcel. También, se develó la casi nula capacidad de respuesta del personal de guardia que estaba ubicado en las garitas, sin el armamento adecuado para contrarrestar un ataque desde afuera.