Una escalofriante escena fue encontrada este miércoles por la empleada doméstica de una vivienda ubicada en calle Aguirre al 200, en el barrio porteño de Villa Crespo: cuatro miembros de la familia muertos. Un padre, una madre y dos hijos adolescentes.
La mujer había intentado ingresar con su juego de llaves alrededor de las 13.30, pero la puerta estaba cerrada desde adentro. Finalmente y después de varios intentos, se las ingenió para entrar y encontró los cuerpos y mucha sangre.
Uno de los chicos estaba en el living, el otro en la cocina, la mujer en el baño y el padre permanecía muerto sobre la cama de su dormitorio con un cuchillo en la mano, por lo que éste último se convirtió en el principal sospechoso del crimen.
Las víctimas fueron identificadas como Adrián Seltzer, de 53 años; su esposa, Laura Fernanda Leguizamón, de 51; y sus hijos Ian, de 15, e Ivo, de 12. Todos vivían en ese departamento del edificio ubicado en Aguirre y Lavalleja.
En 2017, Adrian Seltzer, habló en el Congreso Argentina Supermercado del Mundo sobre los riesgos. Allí, dijo sobre su familia: “Tengo dos hijos hermosos, una esposa amorosa, fantástica. Agradezco muchísimo a la vida haberla encontrado”.
También detalló: “Mi familia es uno de los bienes más preciados que tengo. Para conservar esto que he logrado formar me comporto como hay que hacerlo, para que no me suceda a mí lo que le sucede quizás a la gente de la farándula que las vemos en televisión habitualmente que ‘uy, cometí un error, no sabía que me estaban grabando’”.
Después, reflexionó: “No corro el riesgo, no arriesgo nada que no quiera perder. No quiero perder mi familia, por ende, no la arriesgo, me comporto como tengo que comportarme”.