Coronavirus: la verdad de los hechos del jueves neuquino

A 24 horas de la alarma que sonó el miércoles a las 22 horas en el directorio del Policlínico Neuquén y de la Jefatura de la Policía, van explicándose algunas situaciones detectadas, pero también, quedaron en el tapete los testeos que se utilizan para detectar el coronavirus. Una reconstrucción de la intensa jornada: Esa noche, un policía que salía del quirófano tras una intervención programada en su rodilla, confirmaba positivo tras el hisopado de rigor. Con las horas, otros dos casos arrojaron el mismo resultado, internados en la misma clínica. Rápidamente se decidió: aislar a los contactos estrechos del efectivo -esto repercutió en dos comisarías porque su esposa también es policía- y también al personal médico que participó en la operación.

Los tres estudios se realizaron en un laboratorio de referencia, en Bahía Blanca. El ministerio de Salud de la Provincia solicitó repetirlos: a la tarde del jueves, ya se respiraba de otra manera. Los tres dieron negativos.

Ante este panorama, desde el directorio del Policlínico Neuquén se solicitó un informe explícito al laboratorio bahiense, según confió a este diario Humberto Lorandi, presidente del Policlínico Neuquén, el cual se espera para las próximas horas.

Desde el sindicato de la Sanidad, también se respiró con cierto alivio, aunque cada empleado involucrado en el procedimiento y que horas antes había permanecido aislado, quedó en libertad de solicitar un nuevo análisis por su seguridad. “El doctor Lorandi nos dijo que, si algunos de los compañeros, quería repetir el estudio, no había problemas. Pero efectivamente, dieron negativo”, explicó a Mejorinformado.com la secretaria general de ese gremio, Adalia Nicolau.

El otro sector implicado, la Jefatura de Policía, rápidamente reconoció el caso y tomó medidas, como el aislamiento de los compañeros del policía operado y también de su esposa, amén de desinfectar ambas unidades. Pero no cerró las puertas. Y esto generó malestar puertas adentro de la institución, porque trascendió que los “contactos estrechos” serían muchos más que los identificados hasta ahora y porque los familiares de otros efectivos pusieron en duda, el rigor de las medidas dispuestas.

La referencia no era directamente vinculada al protocolo en particular que define qué medidas adoptar en determinado escenario, sino a los procedimientos certeros para sectores que, por su actividad, ya se encuentran más expuestos y en riesgo. En definitiva, el foco se puso en las decisiones sanitarias adoptadas en este jueves neuquino.