Un joven neuquino murió en las últimas horas en Brasil por un cuadro de hepatitis, al que no pudo superar debido a que no tuvo asistencia médica de urgencia por la saturación del sistema sanitario carioca por la pandemia de coronavirus.
Se llamaba Gabriel Esteban Pichún y tenía 29 años. Su caso se conoció a través de la página oficial de la Policía de Neuquén, ya que en la sección de noticias necrológicas se ofreció las condolencias a su familia. Su hermana, Lorena Paola Pichún, reviste en las filas policiales.
No se dieron a conocer detalles del episodio. Sólo trascendió que Pichún había viajado a Brasil a disfrutar de un tiempo de vacaciones y lo sorprendió allí la pandemia de coronavirus, y no pudo regresar al país.
El escaso apego del presidente de Brasil Jair Bolsonaro a los protocolos sanitarios diseñados por la Organización Mundial de la Salud para evitar la propagación del virus, hizo estallar el sistema sanitario brasilero, y los muertos se cuentan de a miles diariamente.
Fue en ese marco –según trascendió- que Pichún contrajo hepatitis, una patología que no conlleva complicaciones, excepto que no se la trate a tiempo.
Dicen que Pichún no fue atendido en ninguno de los centros asistenciales, que a esa altura se encontraban abarrotados de contagiados de COVID 19.
Brasil, Paraguay y la Argentina son los únicos países en Sudamérica que brindan atención médica gratuita a locales o extranjeros, independientemente del tiempo de residencia que tengan.