Colapsó esta mañana el tránsito entre Cipolletti y Neuquén: un grupo de desocupados identificados con el gremio UOCRA bloqueó los accesos a los puentes. El tránsito fue desviado hacia el tercer puente entre ambas ciudades. Pero como hubo un accidente en ese lugar, llegó un momento en que todo se trabó.
Los desocupados de la UOCRA presionan, obviamente, por puestos de trabajo. Esto se da en un contexto en el que se está por adjudicar dos obras de rutas grandes: la ruta 65 y la 67. No es raro que la interna de la UOCRA resurja ante la expectativa de guardar puestos de trabajo para los distintos sectores referenciados en distintos dirigentes.
Lo concreto es que los vecinos que transitan entre las localidades rionegrinas y Neuquén se encontraron con un escollo casi imposible de superar. Este tipo de protestas, que avasallan ciertamente el derecho a circular, complican además el aspecto sanitario en un tiempo de pandemia que no ha sido superado, sino que se encuentra precisamente en un momento de mucha dificultad, por lo que hay que extremar cuidados para evitar contagios.
El propósito del bloqueo a los puentes se evidenció en la conducta: a media mañana, levantaron esa medida, y fueron a Casa de Gobierno.