Dilan Reyes se despertó después de tres días en coma. Pero se volvió a dormir. Inconsciente, intenta cubrirse con los brazos la cabeza. Balvucea y pide perdón: "Papá, yo no me quise caer, pero me caí y me patearon todo". El joven de 20 años salió como cualquier pibe de su edad, fue al boliche Deja Vu de Cinco Saltos, afuera lo agarró una patota y lo golpeó hasta dejarlo inconsciente, la fiscalía inició una investigación, pero aún no hay detenidos.
El caso de Dilan, hijo de un policía de la Comisaría 43° de Cinco Saltos, evidencia falencias por todos lados. La primera, la disputa de las dos comisarías de la ciudad que el domingo 29 de octubre se peleaban por no ir al lugar. Justo en la Avenida Argentina cambia la jurisdicción.
En la Unidad donde trabaja David Reyes, no hay personal; y en la 7° no había patrulleros, por eso llegaron 40 minutos más tarde. También las falencias del hospital, donde lo atendieron, estaba incosciente pero no lo internaron, dijeron que estaba borracho y que debía esperar durmiendo en su casa. Casi 12 horas después, lo derivaron grave a Roca, donde quedó en Terapia Intensiva con traumatismo severo de cráneo.
Aunque sabe que la investigación no tiene el resultado esperado, Reyes dejó de lado su capacitación policial y sólo se limita a hablar de la salud de su hijo: "Es mi prioridad acompañarlo en su recuperación, viajo todas los mediodías a Roca y vuelvo a la noche", reconoció en "Así Estamos" el programa de Mitre Patagonia 90,5 de Neuquén.
Despierta y se vuelve a dormir, se levanta con un shock psicológico y se cubre la cara, me dice 'papi yo no me quería caer, pero me caí y me patearon todo'
A Dilan lo golpearon entre varios jóvenes, "hay varios identificados, tenemos audios y mensajes", pero "no hay una filmación clara del momento" y casi al pasar desliza la primera queja del procedimiento y aseguró que las medidas de prueba se realizaron tarde. De todas maneras mantiene su optimismo: "Hay una cámara del lugar que muestra cómo fueron las cosas".
Con respecto al estado de Dylan, comentó que "despierta y se vuelve a dormir, se levanta con un shock psicológico y se cubre la cara, me dice 'papi yo no me quería caer, pero me caí y me patearon todo'”. Es que al joven "la patota lo pateó en el piso, lo dejó inconsciente y uno de ellos agarró un ladrillo y se lo partió en la cabeza".
El joven de 20 años continúa internado en Terapia Intensiva, no se habla de pronóstico ni de las posibilidades de recuperación. Los amigos organizaron una marcha para mañana a las 18.30 por las calles de Cinco Saltos, en reclamo de Justicia. La causa por el momento no tiene acusados, el padre reconoció que desde la fiscalía lo llamaron, pero que no sabe el avance de la causa y que están investigando.