Un día a día marcado por desafíos presupuestarios y el abandono de recursos nacionales no ha detenido a la provincia de Neuquén en su compromiso por garantizar la educación pública. Así lo confirmó Soledad Martínez, ministra de Educación, al destacar la inauguración de siete nuevos edificios escolares y ampliaciones que se concretarán en apenas dos meses, una apuesta clara para fortalecer la calidad educativa en todo el territorio provincial.
“Cuando llegamos, nos encontramos con muchas obras paradas. Decidimos terminar esas obras con mucha calidad, y eso nos llena de orgullo”, explicó Martínez en el programa La Primera Mañana de AM550. Este movimiento, que contrasta con la paralización de obras en otras provincias, reafirma una decisión política concreta: priorizar la educación pese a la falta de recursos.
El dato es contundente: Neuquén dejó de recibir 25 mil millones de pesos en transferencias nacionales destinadas a los salarios docentes. Sin embargo, esa ausencia fue cubierta íntegramente con recursos provinciales, gracias a una determinación política del gobernador Rolando Figueroa.
“Desde el primer momento en que Nación decidió no transferir esos fondos, el gobernador decidió que lo íbamos a dar nosotros”, subrayó la ministra.
Esta estrategia permitió no solo continuar con la recomposición salarial docente, sino también avanzar en obras esenciales para las comunidades educativas. Entre las construcciones próximas a inaugurarse se encuentran las escuelas CPEM 104 en Los Catutos, 74 en Caviahue, la primaria 149 de Huaraco, y ampliaciones en la primaria 129 de El Sauce, la 110 de Pichaihue, la EPET 10 de Plaza Huincul y el CPEM 94 de Varvarco.
“La clave está en recuperar la confianza de las comunidades educativas, en demostrar que el gobierno está dispuesto a mejorar las condiciones que impactan en la enseñanza y el aprendizaje. Todo esto, en un contexto muy complejo, y sin recursos de Nación, es una realidad gracias a la decisión política provincial”, afirmó Martínez.
El desafío continúa, pero la provincia mantiene la convicción de que la educación pública es una prioridad irrenunciable. Mientras otras regiones enfrentan incertidumbres, Neuquén avanza con pasos firmes, construyendo escuelas y salarios con recursos propios, y renovando el compromiso con docentes, estudiantes y familias.