En un partido picante y caliente de principio a fin, Boca consiguió un agónico empate en el último minuto ante Rosario Central por 2 a 2. De esta manera, cortó la racha de tres derrotas consecutivas en la Liga Profesional. Los goles fueron marcados por Lautaro Giaccone y Alejo Véliz para el local, mientras que Martín Payero y Nicolás Figal anotaron para el Xeneize.
El inicio del cotejo fue sumamente entretenido, ya que ambos equipos buscaron tomar el protagonismo del juego y mostró un ida y vuelta de alto nivel futbolístico.
A los 11 minutos, el que primero avisó fue Boca con un remate de Payero que se desvió y pasó cerca del arco de Broun, que solo acompañó con la mirada.
Llegando a los 18`, el paraguayo Romero se sacó su marca de derecha a izquierda y con su perfil predilecto, remató rápidamente ante la pasividad de la última línea de Central, que no imaginó la repentización del delantero. Su disparo fue contenido por el arquero local.
Cuando todo era del Xeneize, Campaz sacó un gran zurdazo a los 21` que Chiquito Romero contuvo sin mayores inconvenientes. El aviso del conjunto dirigido por Miguel Russo fue un preludio de lo que vendría.
Cuando el reloj marcaba los 24’, Giaconne se hamacó en el área, gambeteó a Barco y sacó un tremendo bombazo de zurda para darle el 1 a 0 al Canalla. El gol fue de otro partido, pero quebró el entusiasmo de Boca.
Hasta los 36’, el encuentro entró en una meseta. El golazo del delantero de Central descolocó al equipo dirigido por Almirón, que dejó lo bueno que venía haciendo y volvió a las viejas dudas conocidas.
Salvo un cabezazo de Payero (lo mejor de Boca en el primer tiempo), el cual Broun atajó sin dificultades, el Xeneize perdió el protagonismo que había logrado antes del 1 a 0 en contra. Por eso, el pitazo de Ariel Penel que finalizó la primera etapa, llevó aire a Boca y dejó tranquilos a los Canallas.
El complemento arrancó con una polémica. El árbitro Penel observó una acción ilícita dentro del área de Advíncula y marcó penal. Tras la consulta con el VAR, el colegiado decidió revertir su decisión y le quitó la amonestación al lateral peruano.
Hubo que esperar recién hasta los 16’ para sacudir la modorra de la etapa y fue Alan Rodríguez que -de casi 30 metros- sacó un violento disparo que hizo temblar la valla del arco defendido por Chiquito Romero.
Pisando los 18’, cuando mejor jugaba Central, el Xeneize marcó el empate. Tras una gran combinación entre Advíncula y Villa, el equipo de Almirón gestó una ocasión de wing a wing. Briasco abasteció a Payero y el ex Banfield marcó el 1 a 1.
Con la paridad en el marcador y en las acciones de juego, el que buscó primero desnivelar fue el local.Y lo encontró llegando a los 24’: Malcorra inició la jugada al asociarse con Campaz, el colombiano dominó y envió un centro punzante para la llegada de Alejo Veliz, quien celebró el 2 a 1.
El gol calentó el encuentro. Si bien siempre caminó por carriles “picantes”, se desmadró cuando el árbitro expulsó a Miguel Ángel Russo, que estalló de broca al dejar el campo de juego sobre los 29´.
La expulsión, lejos de apaciguar los ánimos, los crispó. Muestra de esto fue el fuerte cruce verbal entre el arquero Romero y Mallo, que terminó con insultos, empujones a granel y amonestaciones para Montoya y Advíncula.
El partido ya no pudo volver a los carriles normales y quien sacó ventaja fue Central, que se abroqueló en el fondo y salió rápido de contra aprovechando la desorientación de su rival.
Por otra parte, Boca fue puro empuje y ganas. Si bien con pocas ideas y muchas individualidades, el Xeneize metió en su arco a Central y consiguió su merecido cuando el partido se iba. Tras un centro desde la derecha, Vázquez peinó el balón dentro del área y Figal de “palomita” puso el 2 a 2. A esa altura el gol le dio justicia al marcador y le permitió al conjunto de Almirón cortar la racha de tres partidos perdidos en forma consecutiva