La novedad no es de estos tiempos. Ya pasó y sigue ocurriendo. El fútbol y la política siempre tuvieron relación directa. Y no es raro, ni deja de sorprender. Pero en este caso los une una situación por demás particular. El candidato a jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por Republicanos Unidos, Roberto García Moritán, montó su sede de campaña en un lugar apegado a los sentimientos de los futboleros. El "bunker" será la casa de Villa Devoto que perteneció a Diego Armando Maradona. La propiedad del “10” había sido adquirida en la década del 80' para luego cedérsela a sus padres, quienes mayormente moraron allí hasta la muerte de ambos.
El alquiler de la propiedad fue confirmado en redes sociales por Yamil Santoro, jefe de campaña del aspirante porteño: “Nueva sede de la campaña de García Moritan para jefe de gobierno, en Devoto, este viernes inauguramos”. Quien lleva adelante la campaña para Republicanos Unidos en el distrito porteño, sostuvo que la idea es recuperar el estado original de la casa: “Vamos a poner en valor un sitio histórico de la Ciudad y de la Argentina”. Y en tal sentido, Santoro agregó “La idea es dejarla como era originalmente. La intención es justamente aprovechar parte del esfuerzo de campaña para eso”.
Ariel Fernando García, de 47 años de edad, compró en noviembre del año pasada la casa que perteneció a Diego Armando Maradona en la década del 80 y que luego le dejó a sus padres. El flamante propietario, a apenas días de hacerse de la vivienda, decidió hacer una cosa insólita. Algo que solamente se puede hacer en un país donde se vive el fútbol como en en el nuestro: la abrió al público, para que cualquiera que quiera pueda ver los partidos de la selección Argentina en el Mundial de Qatar, indicando que "ahí se haga en un ambiente bien maradoneano".
García se enteró que iban a demoler la propiedad y raudamente fue en su rescate. “Le pedí a un amigo el teléfono de la inmobiliaria y le dije que no podían tirarla abajo. En esa charla le expliqué que si me aguantaba le llevaba una seña para comprarla. Le pedí plata a un amigo y lo hice”, precisó el actual dueño de la emblemática propiedad.
Junto a sus hermanos Diego y Damián, García pudo concretar la operación por 900.000 dólares. “Nos entregaron las llaves en el segundo partido (contra México) y empezamos a ganar”, contó el dueño de la casa de los Maradona, mientras en la propiedad celebraban (como en los seis partidos anteriores) una nueva victoria argentina. La más importante, ante Francia en la final que mandó a la Papelera de Reciclaje las frustraciones mundialistas albicelestes que estaban presentes desde 1986 cuando el vecino más famoso del barrio levantó la Copa Mundial en el estadio Azteca en México 1986.
Locuras del fútbol argentino. Cuando la pasión puede más que la razón. Cabe recordar que García Moritan es la actual pareja de Ana Carolina Ardohain, conocida artísticamente como Pampita.