Colo Colo volvió a jugar en el Estadio Nacional de Santiago después de 19 años, pero la esperada fiesta se transformó en una tarde de violencia y caos. Durante el empate 2 a 2 ante Deportes Limache, por la vigésimo quinta fecha de la Primera División de Chile, se desató una feroz pelea entre facciones de la barra brava del “Cacique”, que coparon la tribuna norte.
El enfrentamiento incluyó golpes de puño, uso de armas blancas, muletas y cinturones. Las imágenes, que rápidamente se viralizaron, mostraron una escena de extrema violencia que volvió a encender las alarmas sobre la seguridad en los estadios chilenos.
Hasta el momento no se informó oficialmente la cantidad de heridos ni si hubo detenidos, aunque testigos aseguran que hubo personas trasladadas por los servicios de emergencia. El clima dentro del estadio ya venía tenso desde el arranque del partido: parte de la barra, molesta por el flojo presente del equipo, insultó a los jugadores y exigió “actitud y compromiso” en cada jugada.
El empate ante Limache, rival que pelea por no descender, profundizó la crisis deportiva de los “Albos”, que atraviesan una de las temporadas más irregulares de los últimos años y están lejos de los puestos de clasificación a copas internacionales.
Desde el club, la dirigencia expresó su preocupación por lo ocurrido y anunció que trabajará junto a la Liga Profesional de Chile en nuevas medidas de seguridad y posibles sanciones a los responsables.