Durante el enfrentamiento entre Los Angeles Rams y Houston Texans en el SoFi Stadium de Inglewood, California, se desató una pelea multitudinaria entre seguidores de ambos equipos que terminó con una fanática de los Texans con el rostro cubierto de sangre.
Las imágenes que circularon en redes sociales mostraron cómo una discusión entre dos mujeres, una con camiseta de los Texans y otra con la de los Rams, escaló rápidamente. Varios acompañantes con indumentaria de ambos equipos se sumaron al altercado, y pese a intentos de terceros por separar a las personas involucradas, la situación se agravó cuando la seguidora de los Rams empujó repetidamente a la de Houston.
Según reportó New York Post, la tensión aumentó cuando “el hombre que vestía la camiseta de los Texans le arrojó una cerveza a la mujer que llevaba la camiseta de los Rams”, desencadenando un enfrentamiento generalizado entre los hinchas.
Testigos relataron que durante uno de los momentos más tensos, un hombre con camiseta y gorra de los Rams, mientras sostenía un menor de edad, golpeó a un aficionado de los Texans. Aunque parecía que la pelea había terminado, la mujer con la camiseta de los Rams volvió a agredir a la seguidora de Houston, quien terminó con el rostro ensangrentado.
Incidentes violentos en la NFL y desafíos para la seguridad en los estadios
Personal de seguridad intervino para restablecer el orden y escoltó a los involucrados fuera de las tribunas. La víctima, a través de un video publicado luego del incidente, expresó: “El personal de seguridad acaba de llevarse a mi novio adentro para recuperar mis pertenencias. Me dejaron aquí sin nadie, sin teléfono, sin nada. No sé. Todavía estoy sangrando por el altercado. Solo quiero que esto quede documentado para los abogados de ahora en adelante”.
El diario Daily Mail informó que la mujer evalúa iniciar acciones legales contra los responsables y criticó la respuesta de la organización del estadio ante el episodio.
Voceros de los Rams y la policía de Inglewood no brindaron información inmediata sobre posibles arrestos o investigaciones oficiales. Testigos indicaron que la seguridad escoltó a los seguidores de los Texans hasta el vestíbulo para evitar nuevos incidentes.
El SoFi Stadium, inaugurado en 2020 y sede de Rams y Chargers, ha registrado enfrentamientos similares en el último tiempo. La temporada pasada una pelea entre hinchas locales demoró varios minutos en ser contenida por seguridad, y durante 2024 se observó un aumento en la frecuencia de estos conflictos.
La NFL enfrenta un preocupante incremento de violencia en las gradas. En septiembre, un incidente en el State Farm Stadium de Arizona derivó en el arresto de tres hombres, sumando casos que inquietan a autoridades y organizadores.
En lo deportivo, los Rams vencieron a los Texans 14-9, limitando a Houston a solo 265 yardas totales. Sin embargo, la atención se centró en los hechos violentos fuera del campo de juego.
Los Rams y Chargers seguirán su calendario la próxima semana fuera de Inglewood, en medio de renovados cuestionamientos sobre la seguridad en los estadios y la convivencia entre aficionados rivales.