El intendente de Villa la Angostura, Javier Murer, quedó junto a su familia en el centro de los disturbios e incidentes entre hinchas del partido que jugaron el domingo Chicago de San Carlos de Bariloche y Las Piedritas de Villa La Angostura por la segunda fecha de LiFuBA, que tuvo por escenario el césped sintético del Deportivo Cruz del Sur a orillas del lago Nahuel Huapi en la ciudad del sur rionegrina.
Finalizado el encuentro los hechos ocurrieron cerca de la Plaza Luna, dejando un clima de tensión con corridas, insultos y agresiones, entre ambas parcialidades. Hubo denuncias de algún parabrisa roto, por el intercambio de proyectiles.
El primer mandatario de Villa la Angostura, se encontraba viendo a su equipo, Las Piedritas -del cual es simpatizante-, junto con su familia y quedó en medio de la pelea entre los presentes y aseguró que no había seguridad de ningún tipo.
Tras la repercusiones periodísticas del video que mostraron los desmanes y donde se podía observar a Murer en el conflicto, el jefe comunal aseguró que "estábamos con familia tranquilamente, y de buenas a primeras, gente de la parcialidad de Chicago empezó a agredir", y agregó que "cuando terminó el partido un sujeto volvió, le pedimos que se fuera, ya que incluso Piedritas había perdido, pero empezó a los golpes de puño y en el tumulto de separación se sumó más gente de ellos y se armó lo que se ve en el video".
Murer remarcó que "mi postura en todo momento fue tratar de parar todo lo que estaba pasando. Lo que menos quería era confrontar. Esta gente estaba muy violenta y vinieron de frente a golpearnos. Con nosotros había chicos, familias, las mujeres de los jugadores de Piedritas. Queríamos separar y que se terminara".
Consultados por Mejor Informado los periodistas que asistieron a cubrir las alternativas de juego comentaron "que fue una tarde con mucho viento y bastante asistencia para un partido de la Liga de San Carlos de Bariloche".
Sobre el final del partido hubo una acción que exasperó los ánimos y que todo terminó extendiéndose afuera del terreno de juego. El jugador local Galeano empujó con el hombro a un rival cuando disputaban el balón, quien cayó pesadamente contra el banco visitante, doble amarilla y roja. El periodista de la zona lacustre indicó que "en el post, de la roja mostrada, se vivieron momentos lamentables, con el capitán del equipo local, Hugo Delgado, que provocó a jugadores e hinchas visitantes con expresiones como "ustedes son de la B, neuquinos putos". El clima se enrareció y se caldearon los ánimos lo que obligaron al técnico local y sus compañeros a meterlo dentro del vestuario.
Los incidentes se trasladaron fuera del predio de los Cruzados, que lamentablemente, finalizó con los intercambios entre simpatizantes, algunos exaltados e hinchas siguió afuera del predio, en los incidentes hubo corridas, insultos y algunos proyectiles lanzados entre ambas parcialidades.