La obtención de la Recopa Sudamericana fue el primer título de Racing con Diego Milito como presidente tras ganar las elecciones en diciembre pasado y, de esta manera, se convirtió en la primera persona en ganar trofeos con la Academia en tres roles distintos: como jugador, como director deportivo y ahora como la máxima autoridad de la institución.
La historia de amor entre el Príncipe y Racing se remonta a su debut en 1999. Dos años después de su estreno, fue parte importante en el primer título local del cuadro de Avellaneda en 35 años y se quedó hasta su transferencia en 2003. Después de una laureada carrera en Europa donde, entre otros títulos, ganó la Champions con el Inter marcando dos tantos en la final, el retorno de Milito no pudo ser mejor: volvió en junio de 2014 para, en diciembre, levantar el Torneo Transición 2014. En el club de sus amores totalizó 219 partidos donde llegó a convertir 59 goles.
A fines de 2017, poco más un año después de su retiro, Milito regresó al club como mánager en la presidencia de Víctor Blanco. Su primera decisión fue contratar a Eduardo Coudet como entrenador, que conquistaría la Superliga en 2019. Además, ese verano llegaron jugadores fundamentales para la consagración: Leonardo Sigali, Nery Domínguez y Ricardo Centurión. Luego, trajo a otros que han tenido un gran vínculo con la institución, como el neuquino Gabriel Arias como el mayor ejemplo. Racing ganaría más tarde ese año el Trofeo de Campeones ante Tigre, ganador de la Copa de la Superliga, segundo título como manager del Príncipe. A fines del 2020 sus diferencias con Blanco hicieron que dejara el club y fuera reemplazado por Rubén Capria.
De esta manera, Milito completa nuevamente la misión: cada vez que retornó a Racing, la Academia conquistó un título. En total son cinco de los siete que el conjunto de Avellaneda conquistó en lo que va del Siglo XXI (solamente no estuvo dentro del club en el Trofeo de Campeones 2023 y la pasada Copa Sudamericana). Ahora, el objetivo del mandatario y todo el club albiceleste es una buena Copa Libertadores para materializar la propuesta de campaña de pisar fuerte a nivel sudamericano.