El estudio de MasterChef Celebrity fue escenario de un momento incómodo que rápidamente se volvió tema de conversación. Durante la transmisión, Wanda Nara decidió enfrentar a Valentina Cervantes para cerrar de una vez las especulaciones sobre su vínculo con Enzo Fernández, pero la tensión fue inevitable y quedó registrada para millones de televidentes.
Sin rodeos, Wanda Nara lanzó su aclaración en vivo: “Las pavadas que dicen de mí con tu marido son falsas. Nunca pasó. Todo un invento”. Su frase dejó a todos sorprendidos, ya que nadie esperaba que el tema saliera al aire. Valentina Cervantes, pareja del campeón del mundo, respondió con calma: “Tranquila, no pasa nada. Ya lo aclaré. No sé por qué salen esas cosas”. Sin embargo, su expresión parecía decir mucho más que sus palabras.
El intercambio rápidamente fue analizado en redes sociales. Usuarios de X no tardaron en reaccionar con dudas y críticas. Muchos señalaron que la aclaración de Wanda Nara no hizo más que generar más sospechas. “No aclares que oscurece”, se leyó en varios comentarios, mientras que otros apuntaron que la cara de Valentina hablaba por sí sola.
La historia no es nueva. El rumor sobre un supuesto acercamiento de la empresaria mediática con Enzo Fernández circula desde finales de 2022, tras el Mundial de Qatar. Todo habría comenzado con un misterioso mensaje directo que, según versiones, Wanda Nara le habría enviado al futbolista después de verlo en Santa Bárbara.
Aunque Valentina Cervantes aseguró hace semanas que nunca le preguntó a Enzo Fernández por el tema, Yanina Latorre la contradijo públicamente. La panelista afirmó que Valentina vio y habló del mensaje, cuya captura habría corrido entre algunas esposas de jugadores de la Selección, generando desconfianza hacia la mediática.
Con el episodio todavía fresco, los rumores siguieron escalando. Según trascendió, un grupo de mujeres del entorno de la Scaloneta habría bautizado irónicamente a Wanda Nara con el apodo “Tatiana”, en referencia a personajes que se entrometen en matrimonios ajenos. Un gesto que deja entrever que las heridas en ese círculo aún no cicatrizan.
A pesar de intentar despejar dudas en televisión, la jugada de la conductora no resultó como esperaba. Lejos de apagar el fuego, reavivó la polémica y volvió a instalar su nombre en el centro del huracán mediático.
Todo indica que este capítulo todavía no tiene final. Y en un universo donde las redes opinan más rápido que los protagonistas, cualquier gesto puede sumar más leña al escándalo.