En las últimas semanas se dio a conocer que Matías Martin se puso en pareja con Victoria De Masi, a un año de la separación de Natalia Graciano. En este contexto, el conductor habló sobre las condiciones del romance y mencionó qué tantas chances hay de abrir la pareja en un futuro.
Luego de estar más de 20 años con Natalia Graciano, Matías Martin volvió a confiar en el amor y se puso en pareja con Victoria De Masi. Es por eso que habló sobre este romance y cómo vive estos primeros meses de amor: “Estoy en pareja, muy bien, muy contento y muy feliz”.
Teniendo en cuenta que la noticia aún es reciente, fue inevitable hablar sobre los primeros momentos de este amor. Es por eso que reveló cómo fue que se conocieron y le dieron inicio a este vínculo: “No fue un flechazo, ni algo de una entrevista. Es amiga de Emilce, mi compañera en Urbana Play, así que ya nos conocíamos. Nos encontramos y todo empezó a fluir”.
En este contexto, tras más de 20 años con Natalia Graciano marcó una de las cuestiones que más le cuestan en este nuevo proceso: “Me cuesta un montón usar la palabra ‘noviazgo’. Me parece algo para chicos, y yo ya no soy un nene. La verdad es que siento que mi estado civil es ‘recién separado’. Pero sí, estoy en pareja y estoy contento”.
Es por eso que Matías Martin resaltó que atraviesa por un momento de libertad, más allá de su nuevo vínculo: “Voy a recitales, salgo a comer, no me oculto en lo más mínimo”. Tras esta revelación fue inevitable hablar sobre las condiciones de la relación.
Sucede que los tiempos cambiaron y las relaciones no son las mismas que hace 20 años, por lo que muchas cosas se deben aclarar y una de ellas es la de abocarse a seguir el estilo tradicional de la monogamia o buscar otras formas de relacionarse. Ante la pregunta vinculada a esto, aclaró que su relación iría más por el costado tradicional: “No lo hablamos específicamente, pero para mí, si estoy con alguien, estoy con esa persona. Me parece algo elemental”.
Para cerrar, Matías Martin contó cómo reaccionó su ex a toda esta situación: “Nos llevamos bien, sin conflictos, y armonizamos por los chicos. Nos vemos los cuatro cuando es necesario, como en el cumpleaños de mi hijo menor, donde compartimos una comida con respeto y cariño”.