En medio de una charla distendida por Semana Santa, el programa Sálvese Quien Pueda se convirtió en escenario de inesperadas revelaciones. Mientras hablaban sobre las costumbres religiosas vinculadas a estas fechas, Ximena Capristo sorprendió a todos con una confesión que nadie esperaba. Antes de volverse famosa en Gran Hermano, la panelista tuvo un rol muy distinto al que se la conoce hoy: fue catequista.
La conversación comenzó de forma casual, cuando Yanina Latorre, conductora del ciclo, mencionó que durante el Jueves Santo se puede comer carne, pero no así el viernes. A raíz de esto, se abrió un pequeño debate en el que cada una compartió cómo vive esta celebración en su casa. Fue entonces cuando Latorre deslizó: “Yo fui catequista”. El comentario generó sorpresa, pero nadie esperaba lo que vendría después.
"Yo también", lanzó Ximena Capristo sin rodeos, generando una ola de carcajadas en el estudio. Su respuesta, sincera y sin filtro, descolocó a sus compañeros y dio pie a un momento muy divertido en el programa. Además, agregó con humor: “Encargué pescados y otras comidas, no voy a consumir carne”.
La charla, que había empezado con tintes informativos, rápidamente derivó en anécdotas personales sobre la religión y las costumbres familiares. Yanina Latorre aprovechó para explicar el significado de la Pascua y los detalles de la Cuaresma, incluyendo las restricciones alimentarias típicas de la fecha.
“Durante la Cuaresma, que empieza cuarenta días antes del Domingo de Ramos, no se come carne los viernes”, explicó. También mencionó que el Viernes Santo es uno de los días más importantes, en el que se recuerda la pasión de Cristo y se suelen hacer sacrificios simbólicos.
En ese sentido, Yanina Latorre confesó cuáles serían sus verdaderos sacrificios: “Para mí sería un sacrificio no tomar vino, pero igual voy a hacerlo… Y el chocolate también”. Sin embargo, aclaró que no renunciaría al pescado, uno de sus alimentos preferidos.
Ximena Capristo, por su parte, mantuvo su postura firme y respetuosa frente a las tradiciones: “Yo me organicé para cumplir con lo que creo”, aseguró. Sus palabras reflejan una conexión espiritual que pocos conocían y que sorprendió a más de uno.
Este tipo de revelaciones humanizan a los famosos y nos recuerdan que todos tienen una historia previa al reconocimiento público. Detrás de cada personaje mediático hay vivencias, decisiones y caminos que muchas veces no imaginamos.
La revelación de Ximena Capristo dejó ver una faceta desconocida de su pasado, alejada de los flashes y las cámaras. Su historia demuestra que todos tenemos un recorrido sorprendente antes de llegar a donde estamos. Quién iba a decir que una ex Gran Hermano también enseñaba catecismo.