ANIVERSARIO
AMIA: 29 años del atentado que sacudió el país
Aquel día, un coche-bomba detonó frente a la sede del barrio de Once y dejó un saldo de 85 muertos.Este martes se cumplen 29 años desde aquel fatídico 18 de julio de 1994, cuando Argentina fue víctima de uno de los actos terroristas más devastadores de su historia moderna: el atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en Buenos Aires. Casi tres décadas después, el dolor y el recuerdo de aquella trágica jornada aún perduran en el corazón de la sociedad argentina y de la comunidad judía en todo el mundo.
Aquel día, un coche-bomba detonó frente a la sede de la AMIA en el barrio de Once, dejando un saldo de 85 personas muertas y cientos de heridos. La magnitud del ataque no solo causó una profunda conmoción a nivel nacional, sino que también impactó a la comunidad internacional, que condenó enérgicamente este acto de barbarie.
A pesar de los años transcurridos, el dolor y la angustia persisten en las familias de las víctimas, quienes luchan por mantener viva la memoria de sus seres queridos y por obtener justicia. La investigación de este atentado ha sido un camino lleno de obstáculos, con avances y retrocesos, pero aún no se ha logrado alcanzar una verdad completa ni se ha hecho justicia para aquellos que perdieron sus vidas.
La sociedad argentina no debe olvidar que el atentado a la AMIA no solo fue un ataque a la comunidad judía, sino también un atentado contra los valores fundamentales de la democracia, la paz y la tolerancia. La lucha contra el terrorismo y la impunidad debe ser un compromiso inquebrantable, y es responsabilidad de todos los ciudadanos y las instituciones mantener viva la memoria de este hecho y exigir justicia.
En estos 29 años, han sido muchas las voces que han pedido un esclarecimiento total de lo sucedido, un juicio justo para los culpables y una condena ejemplar que siente un precedente para futuros actos terroristas. Sin embargo, es fundamental recordar que esta tragedia no se limita a la comunidad judía ni a Argentina, sino que se erige como un símbolo universal de los horrores del terrorismo y la importancia de la solidaridad en tiempos de adversidad.
La unidad y el apoyo mutuo son fundamentales para enfrentar la barbarie que intenta desestabilizar nuestras sociedades y sembrar el odio entre sus miembros. En este sentido, es relevante destacar la importancia del diálogo interreligioso y el entendimiento entre diferentes comunidades, construyendo puentes que nos acerquen como sociedad y que nos permitan repudiar en conjunto cualquier manifestación de terrorismo.
En este aniversario, recordamos a las 85 víctimas y expresamos nuestra solidaridad con sus familias y seres queridos. Asimismo, hacemos un llamado a no bajar los brazos en la búsqueda de la verdad y la justicia, para que hechos como este nunca más vuelvan a repetirse.
Hoy, más que nunca, es esencial reafirmar nuestro compromiso con la paz, la tolerancia y la convivencia pacífica entre las diferentes culturas que conviven en nuestra amada Argentina. Solo así podremos honrar la memoria de aquellos que perdieron sus vidas en el atentado a la AMIA y construir un futuro en el que la violencia y el odio sean superados por la fuerza de la solidaridad y el respeto mutuo.