A una semana del trágico derrumbe del hotel Dubrovnik en Villa Gesell, los rescatistas encontraron los cuerpos de tres de los desaparecidos. Por la mañana se halló el cadáver de un carpintero de 54 años que estaba haciendo arreglos en el hotel, y horas más tarde descubrieron entre los escombros a dos plomeros fallecidos.
El carpintero fue identificado como Javier Gutiérrez, mientras que los plomeros se confirmó que eran Mariano Troiano de 47 años y Matías Chapsman, de 28. En total, son siete las víctimas fatales y, de los desaparecidos, resta encontrar a Dana Desimone, que era empleada del hotel y que vivía ahí desde hace seis meses. Además era novia de Nahuel Stefanic, sobrino de la exdueña del complejo, María Rosa Stefanic: ambos fueron encontrados muertos en los primeros días.
El hallazgo del cuerpo del carpintero y los dos plomeros, se dio una zona cercana al tercer piso del hotel Dubrovnik, ya que los tres estaban trabajando juntos en las reparaciones.
El carpintero de 54 años nació en Jujuy, pero desde hace varios años que vivía en la localidad bonaerense de Merlo. Tenía una hija de 15 y deseaba llevarla a ella y al resto de su familia a conocer la ciudad balnearia. Según indicaron sus sobrinos al canal TN, no tenía sospechas de que algo se hubiera hecho mal en el lugar.
En los últimos días, se encontraron los cuerpos de Federico Ciocchini, de 89 años, un turista de Balcarce que se encontraba junto a su esposa, María Josefa Bonazza, en un edificio lindero. Ella, sin embargo, fue rescatada con vida y trasladada a un hospital de Mar del Plata con heridas de gravedad.
“Vi morir a mi marido, pero pude mantener la calma”: dijo la única sobreviviente del derrumbe en Villa Gesell
María Josefa Bonazza, afortunadamente sobrevivió al derrumbe del hotel en Villa Gesell, y contó cómo fue el trágico momento: "Lo único que me hice, además de excoriaciones por todos lados, es una fracturita muy chiquita en el radio de la mano derecha, pero estuve aplastada por las vigas terribles que no se podían mover. No me fracturé nada", dijo en un audio que reprodujo el canal TN.
"Por suerte pude mantener la calma a pesar de lo que sabía que le había pasado a mi marido, porque sentí que fue instantáneo lo de él, pobrecito. Me queda el consuelo que no debe haber sufrido mucho. Estuvimos 48 años felices", lamentó la mujer sobre el fallecimiento de Federico Ciocchini, su esposo de 89 años de edad.