Un colectivo de la línea 57, perteneciente a la empresa DOTA —una de las pocas que no se sumó al paro nacional de colectivos— fue atacado a piedrazos este lunes por la mañana sobre el Acceso Oeste, a la altura del municipio bonaerense de General Rodríguez. El hecho ocurrió minutos después del inicio de la medida de fuerza impulsada por la Unión Tranviarios Automotor (UTA), que reclama una mejora salarial para los choferes.
Según las imágenes que rápidamente se viralizaron, algunas piedras rompieron una ventanilla lateral del micro, provocando la caída de vidrios dentro del vehículo. Hasta el momento no se registraron heridos, pero el episodio generó preocupación entre trabajadores y usuarios.
DOTA, que agrupa a más de 30 líneas en el AMBA, no se adhirió al paro y su director, Marcelo Pasciuto, había solicitado medidas al Ministerio de Seguridad para garantizar el funcionamiento de los servicios. Desde la empresa señalaron que muchas de sus líneas continuaban operativas, pese a las amenazas y el clima de tensión.
Mientras tanto, la paritaria del sector sigue trabada. La UTA reclama llevar el salario inicial a $1.700.000, mientras que las cámaras empresarias ofrecen un aumento de 6% en línea con lo propuesto por el Gobierno nacional. Sin acuerdo, la medida de fuerza continúa y crece el temor por nuevos ataques a unidades que no se plieguen al paro.
Desde el gremio advierten que el reclamo es legítimo y apuntan contra un modelo económico que "niega la inflación".