Lanzado el 24 de abril de 2012, Google Drive se ha convertido en una de las herramientas más populares y ampliamente utilizadas por los usuarios, junto con Gmail. Este servicio de almacenamiento en la nube no solo permite a los usuarios guardar y respaldar sus archivos, sino que también ofrece una variedad de funciones adicionales.
Su popularidad fue tan grande que prácticamente reemplazó a los pendrives como las unidades principales de almacenamiento. En el pasado, si alguien quería transportar un archivo, necesitaba un dispositivo externo que se conectaba a otra computadora para poder acceder a él. Ahora, simplemente se utiliza la nube.
Recientemente, Google emitió un comunicado informando que a partir de agosto, la aplicación dejará de ser compatible con equipos que ejecuten Windows 8, Windows 8.1 y la versión de 32 bits de Windows 10. Estos sistemas operativos han experimentado dificultades con las nuevas versiones y, como resultado, los usuarios no podrán acceder a funciones clave como la sincronización de archivos y la edición colaborativa en tiempo real.
Es crucial estar al tanto de esta actualización para evitar la pérdida de soporte y garantizar el acceso a todas las funcionalidades de Google Drive. Para ello, se recomienda actualizar el sistema operativo del equipo a una versión más reciente que aún tenga soporte para la aplicación.
En el caso de Google Drive, los usuarios reciben de manera gratuita un espacio de almacenamiento de 15 GB en la nube. Sin embargo, si los usuarios necesitan más espacio de almacenamiento, Google ofrece planes pagados que les permiten ampliar su capacidad. Estos planes varían en tamaño y precio, y van desde 100 GB hasta varios terabytes de almacenamiento adicional