El caso es el que tuvo como víctima a Jonathan Lagos de 16 años a quien lo mataron el 6 de marzo de 2012 para robarle una notebook.
El imputado, Maximiliano Martínez, fue condenado por la ex Cámara Primera a la pena de prisión perpetua por el delito de homicidio criminis causa y robo calificado por dos hechos, uno en grado de tentativa.
La defensa presentó un recurso de casación, bajo el anterior sistema procesal penal. Cuando entró en vigencia el nuevo, la causa pasó al Tribunal de Impugnación quien confirmó la sentencia. contra esa resolución la defensa interpuso impugnación extraordinaria.