Según explicó a AM550 el delegado de los conductores de la empresa Indalo, Mario "Cacho” Belmudes, "el ataque que sufrimos fue ayer en el transcurso de la mañana en el ramal 1 en Toma Norte”
"Rompieron dos ventanillas y por suerte no pasó a mayores. No vamos a tomar ninguna medida”, agregó Belmudes y reconoció que " los choferes andamos con miedo. La policía nos acompaño durante los primeros días y después pasa como todo. Hoy tenemos una reunión con la empresa para ver que solución podemos encontrar”.