Un joven de 27 años pasó dos veces en menos de 24 horas por la guardia de la Comisaría Séptima de Plottier. No por haber ido a realizar trámites, sino porque fue detenido en las dos oportunidades en las que intentó robar.
El primer hecho ocurrió el martes cerca de las diez y media de la noche en una vivienda ubicada en Sarmiento y Lácar, de Plottier.
Allí, según el informe policial, entró al garaje de una casa. Lo primero que vio fue una hidrolavadora que estaba en el patio, y decidió llevársela. Sin embargo, el dueño de casa lo vio y, con la ayuda de sus vecinos, pudo "reducirlo” y lo mantuvo ahí hasta la llegada de la Policía. Inexorablemente su destino por esa noche fue la Comisaría Séptima.
Tras haber sido sometido al fichaje, fue dejado en libertad el miércoles pasada la mediatarde. Pero, lejos de amilanarse por la mala fortuna, no bien salió de la unidad policial, caminó por la calle Buenos Aires y al llegar a Riavitz, se metió en una obra en construcción con la idea de llevarse algunas herramientas. Pero fue visto por un par de motoristas y cayó nuevamente preso.
Fue puesto a disposición de la fiscalía interviniente.