Delia Aguado fue sometida a todo tipo de violencia

Delia Aguado “era víctima de constante sometimiento, maltrato psicológico, control y persecución, violencia económica y amenazas por parte del imputado”, el ex gendarme Diego Tolaba. En ese contexto, el fiscal Juan Agustín García basó su alegato de apertura del juicio que está a cargo de un jurado popular y que finalizará con un veredicto el próximo 25. Tolaba afronta el cargo de femicidio por lo que, de ser hallado culpable, sería condenado a prisión perpetua.

El femicidio de Delia Aguado ocurrió la noche del 29 de noviembre de 2018 en Neuquén. La víctima y el imputado habían estado casados durante 13 años, pero Delia había decidido separarse, lo que Tolaba no aceptaba.

El juicio comenzó pasada las nueve y media de la mañana con la realización de los alegatos de apertura de las partes. El fiscal jefe Juan Agustín García, acusó a Tolaba por los delitos de homicidio doblemente agravado por el vínculo -cónyuge- y por haber mediado violencia de género -femicidio-, en carácter de autor.

En el alegato el fiscal jefe describió la teoría del caso del Ministerio Público Fiscal: el hecho ocurrió el 29 de noviembre de 2018, entre las 21 y 22.30. La víctima, fue encontrada sin vida al día siguiente en cercanías del balneario Sandra Canale, ubicado en calle Gatica al fondo de la ciudad de Neuquén.

Ese día cerca de las 21, Tolaba salió con Aguado de la vivienda en la que residían junto con sus hijos. Dijeron que iban a buscar un alquiler y partieron en un VW Gol Country. En el trayecto desde la casa y hasta el lugar del hallazgo del cuerpo, el acusado golpeó a la mujer y luego la asfixió de forma mecánica con un elemento tipo lazo. Esta última maniobra le produjo la muerte por asfixia mecánica por estrangulación.

Luego, el imputado trasladó el cuerpo de la víctima hacia el balneario, lo extrajo del vehículo, lo arrastró hacia la parte trasera del mismo y huyó. Llegó caminando a su casa, explicó a los niños que habían discutido y que ella siguió en el auto y el, a pie. Incluso, a la una y media dela madrugada, intentó radicar la denuncia en la comisaría segunda, pero no se la tomaron.

Al día siguiente, antes del mediodía, fue encontrado el VW Gol en el predio del balneario Sandra Canale y su cadáver, tirado debajo del auto en la zona del baúl.

El caso ocurrió en un contexto de violencia de género. La mujer era víctima de constante sometimiento, maltrato psicológico, control y persecución, violencia económica y amenazas por parte del imputado, explicó el fiscal.

El abogado querellante particular que representa a la familia de la víctima, adhirió a la descripción de los hechos y la calificación legal que expuso García en el alegato de apertura del juicio.

El jurado popular encargado de juzgar el caso está integrado por 16 miembros (hombres y mujeres en partes iguales) de los cuales 12 intervienen como titulares y 4 como suplentes. Los jurados fueron seleccionados en una audiencia previa, realizada el jueves de la semana pasada.

De acuerdo a esta modalidad de juzgamiento, para que el jurado emita un veredicto de culpabilidad, deben reunirse al menos ocho votos sobre el total. En caso contrario, el imputado deberá ser declarado no culpable.

Luego de los alegatos de apertura de las partes, la jueza técnica encargada de dirigir el debate Carina Álvarez, dio las instrucciones generales al jurado: “su función y responsabilidad como jurado es determinar si la fiscalía o la querella han probado su acusación más allá de toda duda razonable”; “el veredicto que ustedes van a dar debe basarse únicamente en la prueba que vean y escuchen en estas audiencias en el juicio”; “no deben formar una opinión definitiva hasta que no escuchen toda la prueba"; “en los juicios criminales donde participa un jurado popular como en este caso, hay dos jueces: ustedes son jueces y yo también soy jueza. Ustedes son los jueces de los hechos, es decir, ustedes van a determinar qué fue lo que paso, qué fue lo que ocurrió y yo soy la jueza que va a decidir sobre la ley aplicable a este caso”; “ni ustedes ni yo podemos preguntar durante el juicio”; “solamente ustedes son los que van a determinar si el acusado es culpable o no culpable”; “no pueden hacer una investigación por su cuenta sobre el caso”. También la magistrada expresó que “lo que diga el fiscal, los querellantes y los defensores no es prueba”, “cuando termine toda etapa de la prueba, el fiscal, la querella y defensores, van a hacer sus alegatos de cierre”; “hasta el final del juicio, no deben discutir sobre el caso”; “en todo proceso penal el acusado tiene derecho de guardar silencio, por lo tanto no puede ser considerado una persona como culpable si usa ese derecho de no declarar y guardar silencio”; “el acusado no tiene que probar su inocencia, es la fiscalía o los querellantes quien tiene que probar que el acusado es culpable”; “nuestra Constitución presume que todas las personas son inocentes hasta tanto se demuestre en juicio que es responsable”.

Debido a que el juicio fue diagramado para realizarse durante nueve jornadas, el veredicto se daría a conocer en principio, el próximo viernes 25.